El padre Barry Braum es surafricano y fue ordenado sacerdote por el obispo Dominique Rey, pues es miembro de los Misioneros de la Santísima Eucaristía, asociación de sacerdotes presente en la diócesis francesa de Fréjus-Toulon. Su talento para la pintura se orientó definitivamente tras leer la carta de Juan Pablo II a los artistas.