El país con mayor número de seminaristas del mundo es a la vez uno de los más peligrosos para ser sacerdote -lo explica el padre Andrew en Religión en Libertad en este enlace-. Los secuestros son uno de los peligros más frecuentes, también las matanzas. Alewa Richard Luka es seminarista de la diocesis de Pankshin. Erigida hace menos de una década, destaca por no haber parado de construir iglesias, escuelas, hospitales y clínicas para atender las necesidades de la población católica, pero también por muertes diarias debido al hambre o la violencia. Los católicos de esa zona del norte del país son una minoría, pero están llenos de celo apostólico. También los hay que han perdido la fe afectados espiritualmente por el hambre atroz. El seminarista cuenta a Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN) que quiere ser consuelo para todos los que sufren en su país, motivado por su deseo que le acompaña desde la infancia de ser como los sacerdotes que veía ayudar a todos.
"Quiero ayudar a estas personas, ser alguien que les ayude a que vuelvan a la Iglesia. Quiero servir a la gente con todo lo que Dios me ha dado, enfocarme en ser un buen sacerdote y servir a Dios con todo mi ser", admite Alewa. [Pincha aquí para ayudar a Alewa y a otros miles de valientes seminaristas a través de ACN.]