En las últimas fechas han trascendido dos importantes giros en la evolución del caso del ex jesuita y artista Marko Rupnik (n. 1954): el primero, su incardinación en la diócesis de Koper, en su Eslovenia natal; y segundo, el levantamiento de las prescripciones sobre sus hipotéticos delitos para que pueda ser investigado por ellos.