Francisco ya está en Hungría para su nuevo viaje apostólico, que concluirá el domingo. Finalizada la recepción en el aeropuerto, al subirse al automóvil para continuar su agenda, mantuvo una breve conversación con su chófer en torno a un muñeco con su propia figura que se encontraba allí... a la espera de lo que sucedió. ¿Tal vez un regalo del privilegiado conductor a sus hijos? Pincha aquí para conocer cómo han transcurrido las primeras horas del Papa en el país magiar.