Juan Carlos Gavancho, sacerdote peruano de la diócesis de Chicago (Estados Unidos), compuso Muchas gracias, Benedicto cuando renunció al pontificado y la ha dado a conocer tras su muerte: "Es un modesto homenaje", explica, "a este gigante de la fe. Benedicto XVI me enseño a amar a Cristo y a su Iglesia. Dios tenga misericordia de su alma y llegado el momento le premie por todo lo bueno que hizo. Desde el cielo, sea un incansable intercesor para que la Iglesia vuelva a ser la luz del mundo y la sal de la tierra. Descansa en paz, Maestro".