El monasterio de San Pedro de Arlanza (Burgos) fue uno de los escenarios donde Sergio Leone rodó en 1966 El bueno, el feo y el malo, uno de los grandes spaghetti western que consagraron a Clint Eastwood. Es, en cualquier caso, un elemento más en la historia de un monumento de gran relevancia, víctima, como tantos otros, de la desamortización de Mendizábal, como nos recuerda el periodista Álex Navajas.