La abadía cisterciense de Bricquebec, cerca de Cherburgo, en Normandía (Francia), fue fundada en 1823. Sufrió al principio epidemias, incendios y guerras, pero perseveró y se ha mantenido desde entonces. En 1969, el padre Marc puso en marcha una granja porcina con cuarenta gorrinos, creando así una auténtica charcutería de la Trapa, con los cuales se fabrican sus embutidos y unos afamados patés y rillettes. Los 12 monjes de la comunidad no lo producen todo personalmente, pero medio siglo después el padre Marc sigue supervisando el proceso con mano maestra. Sus productos pueden adquirirse a través de Divine Box.