El hallazgo de unas tumbas en una antigua escuela residencial para niños indígenas en Canadá está siendo explotado por el gobierno de Justin Trudeau para obtener beneficios políticos, por las grandes compañías extractoras para desproteger a la mano de obra indígena y por la cultura woke para demonizar las raíces cristianas del país y la labor de los misioneros, que mejoraron el nivel educativo de miles de indios y lo hicieron además en su lengua nativa, salvaguardando su cultura. Pablo Muñoz Iturrieta, doctor en Filosofía Política y Legal por la Carleton University/Dominican University en Ottawa (Canadá) y máster en Psicología Filosófica por la Universidad Católica de América en Washington D.C., cuenta la realidad de estas escuelas y denuncia la manipulación con la que se ha presentado la noticia.