El hogar Abia Merino, que forman Carlos, Cristina y sus ocho hijos, tiene al último de ellos, Pedro, en el cielo. El pequeño, a quien desde el embarazo detectaron graves enfermedades, cumplió una misión insospechada en sus cinco años de vida: descubrir una vocación nueva para su familia. Su historia es protagonista del tercer episodio de Contagiosos, la serie de Juan Manuel Cotelo sobre personas que transmiten la luz de Dios casi sin darse cuenta de ello. Pincha aquí para conocer más cosas sobre las bendiciones que recibieron.