Este sábado 28 de noviembre, la Argentina provida se echa de nuevo a la calle para salvar las dos vidas, la del no nacido y la de la madre que, con el aborto, en cierto modo muere con su hijo. Hace dos años logró pararse su liberalización, y ante el nuevo intento encabezado por el presidente Alberto Fernández, cientos de miles de personas se movilizan con el mismo objetivo.