El pabellón de la Feria de Madrid (Ifema, Instituto Ferial de Madrid), lleno de enfermos, se convirtió en uno de los símbolos de la lucha contra el coronavirus en España. Hasta allí se desplazaron siete capellanes, entre ellos Juan Jolín, que atendió a unas 150 personas en 35 días: «Nuestra labor como capellanes era, sobre todo, escuchar. Y que te puedan contar lo que les pasa, lo que les hace sufrir, sus inquietudes. Y después, en la medida en que te lo piden o ves que lo necesitan, acercarles a Cristo a través de la oración o los sacramentos». Lo cuenta en uno de los capítulos de la serie Una Iglesia, 10 historias, en la que participan la Conferencia Episcopal Española, la emisora de radio COPE, el canal televisivo Trece y la revista Ecclesia.