Los dos Papas, la película de Fernando Meirelles que fabula sobre un encuentro hipotético -que nunca tuvo lugar- entre Benedicto XVI antes de su renuncia y el cardenal Jorge Mario Bergoglio, ha suscitado opiniones contrapuestas. Intrigado por esa disparidad, el sacerdote Javier Luzón Peña, profesor de Antropología Teológica y antiguo exorcista en la archidiócesis de Madrid, la vio y ofrece su comentario, abiertamente negativo por el maniqueísmo y la condición manipuladora del film.