Durante una reunión con miembros del grupo de trabajo que prepara algunas propuestas de reforma de la Constitución rusa, Vladimir Putin afirmó que, como presidente, respetará la naturaleza del matrimonio como unión entre un hombre y una mujer, y no permitirá la adopción de niños por parejas del mismo sexo que oculten bajo la extravagancia del «progenitor 1 y 2» que se ha privado al menor de un padre o una madre.