El adoctrinamiento en las aulas se ha introducido en los currículos a través de las legislaciones autonómicas, violando el derecho de los padres a conocer y a consentir los contenidos que se les transmite a sus hijos. El presidente de Educación y Persona, Fernando López Luengos, profesor de Filosofía en la enseñanza pública española, denuncia la instrumentalización de las actividades supuestamente destinadas a educar en «igualdad y tolerancia», que de facto imponen a los alumnos un modelo antropológico y ético concreto incompatible, por ejemplo, con el cristiano.