Philip Rivers, de 37 años, quarterback de Los Ángeles Chargers, es uno de los mejores en su puesto, acreditando, entre otros récords absolutos de la Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL), el de mayor porcentaje de pases completados en un partido, un 96,55% logrado en 2018. Es además católico practicante y padre de nueve hijos, y benefactor de las Hermanas Dominicas de María, Madre de la Eucaristía, un fenómeno vocacional en Estados Unidos: fundadas en 1997, son ya 140 religiosas con una edad media de 32 años, asentadas básicamente en Texas y California. Cuando este domingo las vio en Detroit, antes del partido contra Detroit Lions (que ganaron los de Illinois por 13-10), Rivers no dudó en acudir a saludarlas.