Un toponímico sintetiza todo lo que significaron las sacas de presos durante el terror impuesto por el Frente Popular en Madrid durante la guerra civil española (1936-1939): Paracuellos del Jarama, un municipio a 11 km de Madrid. Se tardaba horas en recorrer esa distancia, porque había que pasar once controles de carretera distintos. La logística necesaria (contraseñas, vehículos, milicianos, gasolina, munición) apunta la responsabilidad política máxima en las matanazas. Así lo explica José Manuel Ezpeleta en Marcando el Norte (HM Televisión).