La cultura dominante considera el amor como un sentimiento, y no como un compromiso. Ese error es letal para el matrimonio, porque distorsiona su naturaleza y sus expectativas. El obispo de San Sebastián, José Ignacio Munilla, citó este hecho entre otros riesgos para la vida conyugal, durante una conferencia el 21 de abril de 2018 en el seminario de la diócesis.