Humanae Vitae: profética, profunda y «la protección frente a la tiranía del control de la población»
Hace poco más de 50 años, el Papa Pablo VI publicó Humanae Vitae, una encíclica de gran impacto sobre la belleza del amor y la sexualidad.
Para resaltar la importancia de este documento, la Cátedra Internacional de Bioética Jérôme Lejeune organizó en Roma un congreso internacional hace unos días.
Una doctrina muy actual
El evento estuvo dirigido a jóvenes, matrimonios, formadores, sacerdotes, médicos, profesores, teólogos... "que quisieran volver a descubrir esta llamada profética a favor de la dignidad del amor y la vida humana. Para afrontar las dificultades del mundo contemporáneo, con testimonios de esposos y médicos".
Una oportunidad para descubrir la audacia de este texto de referencia, "verdadero baluarte contra la manipulación de la vida humana y una invitación a acoger la vida".
"La verdad expresada en la Humanae Vitae no cambia, mas aún, a la luz de los nuevos descubrimientos científicos, su doctrina se hace más actual e impulsa a reflexionar sobre el valor intrínseco que posee", expresó el cardenal español Luis Francisco Ladaria, Prefecto del Dicasterio para la Doctrina de la Fe.
En su intervención, el prefecto aseguró que "rechazar la encíclica no supone, solamente, aceptar la moralidad de la anticoncepción, sino que implica asumir una antropología dualista que ve en la naturaleza una amenaza a la libertad y que considera que manipulando el cuerpo se pueden cambiar las condiciones de verdad del acto conyugal".
Del mismo modo, manifestó con firmeza que "la vida, fabricada, ya no se considera, por sí misma, como 'don', sino como 'producto' y pasa a ser valorada en función de su utilidad". "A pesar de la persistencia de las críticas injustificadas y de silencios inaceptables, han podido demostrar con claridad creciente que el documento de Pablo VI fue siempre no sólo de palpitante actualidad sino de un rico significado profético", expresó el prefecto.
Puedes leer aquí la intervención completa del cardenal Ladaria.
Para Guadalupe Alsina, secretaria general de RENAFER, el Congreso supuso una gran experiencia. "Nos ha elevado el espíritu y tocado algo que nosotros vivimos en el día a día en la consulta, que es el bien que hace a los matrimonios los métodos naturales. Cómo son realmente un estilo de vida que cambia la forma de vivir la sexualidad, y que promueven una mentalidad provida", afirmó.
'La vida, fabricada, ya no se considera, por sí misma, como 'don', sino como 'producto' y pasa a ser valorada en función de su utilidad'.
Entre los estudiantes había procedencias de diferentes países de Europa. "Creo que esta encíclica, como se nos ha recordado en el Congreso, tiene realmente un carácter profético, que nos permite comprender mejor las cuestiones que se plantean hoy en día", comentó un estudiante suizo de Medicina.
La novedad de los testimonios
Para una de las asistentes, de origen alemán, la Humanae Vitae tiene una importancia muy profunda. "De lo que se trata es de algo tan profundo, tan grande, tan humano, que importa a todo el mundo. Es hablar de la vida, del amor, del manejo de la sexualidad... son cosas que nos importan a todos", expresó.
Monica López Barahona, titular de la Cátedra Internacional de Bioética Jerome Lejeune, habló de los aportes del Congreso. "Una novedad ha sido contar con el testimonio de matrimonios que han vivido en primera persona la Humanae Vitae. Que la han vivido desde el inicio, desde el noviazgo y en el matrimonio", apuntó.
"Pero también que no la han vivido en la primera parte del matrimonio, y la han descubierto a posteriori, y esto ha dado un sentido actual y profundo de su vivencia conyugal. Las conclusiones de este Congreso son importantísimas, es una invitación a que la Humanae Vitae sea una encíclica que se vuelva a leer y a ser la guía en el matrimonio católico", añadió.
Puedes ver aquí cómo fue el Congreso sobre la Humanae Vitae.
Entre los ponentes internacionales estaba Obianuju Ekeocha, bióloga presidente de Culture of Life Africa. "Humanae Vitae es el único documento que puede ser nuestra protección, la protección del pueblo africano y de la dignidad de las mujeres africanas. Un documento que detiene y reprime este horrible movimiento hacia la tiranía y hacia el control forzoso de nuestra población", aseguró.