Santa Aurelia de Regensburg, reclusa.
De una piadosa leyenda y una lápida cruzada.
Santa Aurelia de Regensburg, reclusa. 15 de octubre.
Según las tradiciones conocidas, Aurelia vivió en el siglo X, era hija de Hugo Capeto, primer rey de la dinastía de los Capeto, y desde niña era piadosa, amante del silencio y el recogimiento. Era muy devota de hacer la señal de la cruz e invocaba a la Santísima Virgen en todas sus tentaciones y adversidades. En 975 huyó de su familia vestida de hombre, cuando su padre intentó casarla con un matrimonio arreglado (huyó la misma noche de bodas, según algunas versiones). Aurelia atravesó bosques y pantanos, asediada por bestias y demonios, que ahuyentaba con la señal de la cruz. Sobrevivió de limosnas hasta que llegó a Ratisbona, donde San Wolfgang (31 de octubre) la recibió y le dio el velo de las vírgenes. San Ramwold (17 de junio), abad del monasterio de San Emmeran le admitió en una celda como reclusa, donde vivió 52 años de su vida. Murió el 15 de octubre de 1027. Luego de su muerte fue sepultada en la misma celda del monasterio que había ocupado. Su tumba fue objeto de veneración durante siglos, por lo que muy pronto dicha celda fue convertida en una capilla. Aún en el siglo XVI su culto se mantenía con cierta vitalidad y su día era festivo. Actualmente la lápida, sobre pilares, se conserva en el claustro del monasterio.
Hay bastante vacío relleno de leyenda en la vida de Aurelia de Regensburg, como para fiarnos de todo lo que de ella nos ha llegado. El primer problema es que Hugo Capeto solo tuvo un hijo, llamado Roberto. El segundo es la escultura yacente que cubría su sepultura, puesto que en realidad es anterior a la época de Aurelia, por lo que no la representa a ella. Dos conclusiones se dan, una es que sea reutilizado, identificando la figura de la dama con Aurelia, o que se trate de un altar relicario de otra santa del mismo nombre que también se venera a 15 de octubre: Santa Aurelia de Strasburgo.
Fuentes:
-“La leyenda de oro para cada día del año: vidas de todos los santos”. Volumen 3. P. PEDRO DE RIVADANEIRA. Barcelona, 1866.
-“Christian Mythology“. GEORGE EVERY. New York, 1970.
-“Heilige, Selige und Diener Gottes im Bistum Regensburg“. EMMERAM H. RITTER. Regensburg, 1989.
Según las tradiciones conocidas, Aurelia vivió en el siglo X, era hija de Hugo Capeto, primer rey de la dinastía de los Capeto, y desde niña era piadosa, amante del silencio y el recogimiento. Era muy devota de hacer la señal de la cruz e invocaba a la Santísima Virgen en todas sus tentaciones y adversidades. En 975 huyó de su familia vestida de hombre, cuando su padre intentó casarla con un matrimonio arreglado (huyó la misma noche de bodas, según algunas versiones). Aurelia atravesó bosques y pantanos, asediada por bestias y demonios, que ahuyentaba con la señal de la cruz. Sobrevivió de limosnas hasta que llegó a Ratisbona, donde San Wolfgang (31 de octubre) la recibió y le dio el velo de las vírgenes. San Ramwold (17 de junio), abad del monasterio de San Emmeran le admitió en una celda como reclusa, donde vivió 52 años de su vida. Murió el 15 de octubre de 1027. Luego de su muerte fue sepultada en la misma celda del monasterio que había ocupado. Su tumba fue objeto de veneración durante siglos, por lo que muy pronto dicha celda fue convertida en una capilla. Aún en el siglo XVI su culto se mantenía con cierta vitalidad y su día era festivo. Actualmente la lápida, sobre pilares, se conserva en el claustro del monasterio.
Hay bastante vacío relleno de leyenda en la vida de Aurelia de Regensburg, como para fiarnos de todo lo que de ella nos ha llegado. El primer problema es que Hugo Capeto solo tuvo un hijo, llamado Roberto. El segundo es la escultura yacente que cubría su sepultura, puesto que en realidad es anterior a la época de Aurelia, por lo que no la representa a ella. Dos conclusiones se dan, una es que sea reutilizado, identificando la figura de la dama con Aurelia, o que se trate de un altar relicario de otra santa del mismo nombre que también se venera a 15 de octubre: Santa Aurelia de Strasburgo.
Fuentes:
-“La leyenda de oro para cada día del año: vidas de todos los santos”. Volumen 3. P. PEDRO DE RIVADANEIRA. Barcelona, 1866.
-“Christian Mythology“. GEORGE EVERY. New York, 1970.
-“Heilige, Selige und Diener Gottes im Bistum Regensburg“. EMMERAM H. RITTER. Regensburg, 1989.
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