Domingo, 22 de diciembre de 2024

Religión en Libertad

Beatas Salomé y Judith. Reclusas.

Dos leyendas y un solo amor: Cristo.

Ramón Rabre

Todos los Santos de Niederaltaich.
Todos los Santos de Niederaltaich.

Beatas Salomé, virgen, y Judith, viuda; de Niederaltaich, reclusas. 29 de Junio.

A finales del siglo XI o principios del siglo XII vivieron y fallecieron dos reclusas que tenían su celdilla adyacente a la iglesia de la famosa abadía benedictina de Niederaltaich. Eran dos mujeres penitentes, que eligieron ese tipo de vida en diferentes momentos, una en pos de la otra. Se llamaban Salomé y Judith. Y eso es todo lo que de ellas podemos saber con certeza. Y que murieron enfermas y agotadas. Todo lo demás que se nos cuenta, escrito en el mismo monasterio, y cuando la devoción popular en torno a las reliquias va aumentando, es legendario y de sabor épico.

Según la “vita”, la Beata Salomé, a quien a veces se le suele representar como monja benedictina, era una princesa de origen inglés, que emprendió una devota peregrinación a Jerusalén, donde visitó los Santos Lugares, el Monte Carmelo, veneró las reliquias de los santos. Regresó por Marsella, visitó París y santuarios de otras ciudades. En este viaje tomó la resolución de no regresar a su palacio, sino dedicarse a servir a Jesucristo como él le indicase. En Gefährtinen tuvo las primeras tentaciones y sufrimientos, de los que salió confortada con una visión de Cristo crucificado, que la animaba a consolarle obviando sus propias penas. Al cruzar el Danubio, el demonio la arrojó al agua y casi muere, pero fue salvada por milagro. Al llegar a Regensburg, se sintió enferma y descubrió que había enfermado de lepra. Al poco tiempo quedó ciega y tuvo que mendigar para sobrevivir.

En Passau se encontró con una buena mujer que le permitió vivir junto a su casa, desde donde se dirigía todas las noches a rezar a la iglesia, cuando ya no había nadie, para que no la echaran por leprosa. Ambas vivían en gran pobreza y lo compartían todo. El hermano de esta mujer era amigo del abad de Niederaltaich, y la puso en contacto con este, para que le diera dirección espiritual. Salomé le pidió por caridad al abad la dejase quedarse por los alrededores, comiendo de las sobras y oyendo misa desde la puerta. Era tanta su humildad, devoción y aún caridad con los más desfavorecidos que pululaban por el monasterio, que los monjes le tomaron afecto y le permitieron tomar el velo de religiosa y emparedarse en una celdilla con una ventana a la iglesia para seguir el culto y otra al exterior, para recibir alimento por limosna.

Aquí vivió un tiempo, hasta que un día pasó por el monasterio su tía (prima o amiga, según las versiones) Judith, igualmente noble, que había enviudado y perdido sus hijos. Judith había seguido los pasos de su sobrina, camino de Tierra Santa, esperando hallarla, pero no fue hasta llegar a los dominios de Niederaltaich, cuando supo de aquella reclusa con fama de santa. Enterada de su historia, supo que era su sobrina y le pidió, y obtuvo, al abad, emparedarse con ella en la celdita.

Salomé murió a los 10 años de vida recluida, y fue enterrada en el monasterio. Judith aún le sobrevivió unos cuantos años más y luego de morir fue enterrada junto a su sobrina. en un sarcófago de mármol en el que se lee "Judith y Salomé, rogad a Dios por nosotros". En breve de dejaron sentir los milagros por medio de las reliquias de las santas mujeres, y comenzó el culto. Todavía hoy se veneran las reliquias en la abadía de Niederaltaich, a pesar de los avatares padecidos por el monasterio.

Fuente:
-“Baviera Santa. Vida de los santos y beatos del país, para la instrucción y edificación del pueblo cristiano”. DR. MODESTO JOCHAM. Freising, 1861.

Comentarios
5€ Tu donativo es vital para mantener Religión en Libertad
10€ Gracias a tu donativo habrá personas que podrán conocer a Dios
50€ Con tu ayuda podremos llevar esperanza a las periferias digitales
Otra cantidad Tu donativo es vital para mantener Religión en Libertad
Tu donativo es vital para mantener Religión en Libertad
Si prefieres, contacta con nosotros en el 680 30 39 15 de lunes a viernes de 9:00h a 15:30h
Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter

¡No te pierdas las mejores historias de hoy!

Suscríbete GRATIS a nuestra newsletter diaria

REL te recomienda