De la televisión al altar: dejará de ser «el hombre del tiempo» para entrar en el seminario
Youngstown, una ciudad en torno a 70.000 habitantes en el estado de Ohio (Estados Unidos), se va a quedar sin "hombre del tiempo". Craig Ziobert, de 31 años, presentador de la información meteorológica en la cadena local WKBN (que presenta dicha sección como uno de sus puntos fuertes) anunció hace dos semanas que en septiembre ingresará en el seminario diocesano de Santa María, en Wickliffe.
La noticia no ha sorprendido mucho en su entorno, porque desde que era niño ha frecuentado la basílica del Monte Carmelo, su parroquia. En ella fue a la escuela, hizo la Primera Comunión, fue monaguillo y recibió sus primeras lecciones de órgano.
En primer término, Craig ejerciendo de monaguillo cuando era niño.
Precisamente estudió música en la universidad del estado, por lo cual ha sido organista principal y director del coro. Luego se licenció en Meteorología en la Mississippi State University, origen de su trabajo actual.
Un buen pastor
En conversación con Patty Knap para National Catholic Register, cuenta que quien más le animó a dar este paso fue el obispo de Younstown, George Murry, fallecido en 2020 a consecuencia de una leucemia. Cuando llegó a la diócesis en 2007, Craig ya estaba considerando ser sacerdote y se lo comentó: "Me enseñó lo que es el liderazgo pastoral, su personalidad me atrajo cada vez más a la vocación. Pero yo aún tenía ciertas reservas y otros intereses en la vida que estaba considerando".
Los años en los que se lo estuvo pensando, monseñor Murry fue paciente: "Siguió enriqueciendo mi vocación y apoyando mi trabajo en el coro de la catedral... Su muerte fue un momento clave en mi vida porque tuve un sentimiento de pérdida y de vacío, pero me hizo comprender que tenía una vocación más elevada, aunque estuviese cumpliendo mis sueños en otras áreas de la vida".
Craig, con el obispo Murry, decisivo en su vocación y fallecido hace un año.
Fue así como se decidió a dar el paso, también con el respaldo de su párroco, Michael Cariglio, que está en Monte Carmelo desde que Craig nació: "Me bautizó, me dio la Primera Comunión y ha sido mi supervisor y director musical desde 2016. Mi familia se sentaba en el primer banco, así que le he visto celebrar misa desde niño".
Pensando en el futuro
El "hombre del tiempo" de Younstown presume de haber colaborado a lo largo de su vida con la mitad de los sacerdotes de la diócesis y conoce a todos ellos y a todos los seminaristas, así que su nueva vida en el seminario va a ser un cambio suavizado.
Craig, en la basílica del Monte Carmelo de Youngstown.
"Mi familia y amigos me apoyan al 100%", añade: "Tengo amigos de muchos orígenes religiosos distintos, y aunque no todos entienden igual la religión católica, comparten mi futuro papel como sacerdote... Un amigo ateo me dijo que, aunque no comprende por qué lo voy a hacer, está orgulloso de que desde ese papel pueda ayudar a mucha gente. Y mi mejor amigo, Matthew, que vive en Washington D.C., y que es luterano, piensa que ésta es una vocación perfecta para mí".
Craig también se siente agradecido por el cariño mostrado por sus compañeros en la televisión: "Dicen que me echarán de menos... y seguro que yo también a ellos".