El pasado 1 de enero, fiesta de la Virgen, fueron acogidos en el catolicismo
San Juan Pablo II, Newman y la doctrina católica han guiado a la Iglesia a este pastor y su familia
El pasado 1 de enero, festividad de María Madre de Dios, Andrew Petiprin dejaba de ser un conocido pastor episcopaliano de Estados Unidos para convertirse junto con su mujer y sus dos hijos al catolicismo. Una nueva vida empieza de cero para esta familia. Se sienten por fin en casa y aunque él se ha quedado sin trabajo confía en que la providencia hará el resto.
“La bienvenida que nos ha dado la congregación de la iglesia de San Patricio en Nashville ha sido emocionante. Gracias al Señor por su bondad para con nosotros. Gracias a la Santa Virgen María y a todos los santos en el cielo rezando por nosotros y dándonos ejemplo de plenitud. Gracias a todos en el mundo que han rezado por nosotros y nos han alentado”, escribía este nuevo católico en su cuenta de Facebook tras ser acogido en la Iglesia.
Una conversión que en realidad empezó hace 16 años
El proceso de discernimiento que le ha llevado al catolicismo ha sido muy largo, muchos años en los que poco a poco se ha ido convenciendo de que su lugar estaba en la Iglesia. En una entrevista con Aciprensa, Andrew Petripin se remonta hasta 2002 para hablar del inicio de esta conversión. En aquel momento –asegura- se convirtió en un “importante anglicano” y creyó que se “estaba uniendo a una rama auténtica de la Iglesia Católica. Ya no creo eso, pero incluso entonces ya estaba en el camino hacia la plenitud de la fe”.
Andrew, con su mujer y dos hijos, junto al padre John Hammond, que les dio la bienvenida a la Iglesia el pasado 1 de enero
Uno de los momentos claves se produjo en 2005. “Cuando San Juan Pablo II murió tuve un fuerte sentimiento de estar conectado a él y a la Iglesia y pensé en que un día me haría católico. ¡Resultó que eso me costaría más de 13 años!”, explica.
Otro personaje importante que le ha ido guiando en este tiempo ha sido el beato John Henry Newman, que realizó un camino similar al suyo, tras renunciar a su vida como sacerdote anglicano para ser católico.
Del mismo modo, el libro que él mismo Petripin escribió siendo sacerdote anglicano le fue convenciendo de la idea de que la Iglesia era el lugar en el que debía estar. Se titula Thruth Matters: Knowing God and Yourself (La verdad importa: Conociendo a Dios y a ti mismo).
La Iglesia Católica, guardiana de las doctrinas
“Lo escribí siendo sacerdote episcopaliano para una casa editorial evangélica, pero el proceso de terminar de escribirlo es directamente responsable de mi conversión. Me decidí a escribir una defensa ecuménica de algunas doctrinas cristianas básicas y descubrí al final que la Iglesia Católica es y siempre ha sido la guardiana de estas doctrinas. Ya no pude decirlo en el libro pero espero que los no católicos lo lean y luego vayan al Catecismo de la Iglesia Católica, conversen con un sacerdote y comiencen a explorar la fe católica”, explica este padre de familia.
En todo este tiempo, Andrew Petripin ha ido enamorándose de la figura de la Virgen María, convirtiéndose en uno de los grandes descubrimientos que ha hecho en el catolicismo. Relata que siente una “fuerte devoción a Nuestra Señora. En los últimos meses he comenzado a rezar el Rosario y a pedir la intercesión de María. Amarla tiene que ver todo con amar a Jesús. Su amor maternal por mí me inspira un amor más profundo por su hijo, mi salvador”.
"Un fuerte deseo por la Verdad"
Durante el 2018 asegura que “el Señor me ha dado un fuerte deseo por la Verdad. Mi decisión no se basa en lo que veo equivocado en el anglicanismo, sino en mi deseo de creer en todo lo que la Iglesia enseña”.
Además, Andrew Petripin explica cómo vivió el momento de incorporarse al catolicismo: “Mi esposa y mis hijos también han sido recibidos y confirmados, y nosotros cuatro recibimos la Primera Comunión juntos. Estamos emocionados por el hecho de saber que viviremos como una familia católica”.
Con el paso que ha dado, este antiguo sacerdote se ha quedado sin trabajo, y aunque está abierto a discernir “sobre una eventual formación para el sacerdocio católico, ahora me siento más alentado a encontrar un buen trabajo y vivir la fe católica con mi familia siendo laico”.