El padre Sergio, primer sacerdote al que Youtube da el «Botón de plata»: tiene 200.000 suscriptores

El sacerdote paulino mexicano Sergio Argüello se ha convertido en uno de los grandes youtubers católico en todo el mundo. De hecho, así se lo ha reconocido el propio Youtube, al concederle el “Botón de Plata”, distinción que este canal de vídeos le ha otorgado por conseguir más de 200.000 suscriptores.

En sus más de 400 vídeos, el canal “Padre Sergio, una parroquia digital” ha conseguido más de 22 millones de reproducciones, ayudando así a miles de personas tanto creyentes como otras que llegan a sus intervenciones casi por casualidad.

Nunca pensó en convertirse en un cura youtuber

Según informa Excelsior, Sergio Argüello es el primer sacerdote en el mundo en recibir este reconocimiento. Nunca pensó que sus vídeos acabaran teniendo tal repercusión pues en realidad abrió su canal en Youtube cuando cambió de destino pastoral, y así poder sentirse más cercano a su antigua comunidad.

Este religioso habla de temas religiosos de actualidad, las lecturas de evangelio, peticiones de los habitantes, explica los pasajes bíblicos de Jesús; señala que busca predicar y que los católicos no pierdan la fe.

Y además, ofrece testimonios de personas que puedan ayudar a otros. Asegura que gracias a algunos testimonios que han aparecido en su canal ha habido personas que se han alejado del suicidio, tal y como le informaron los propios protagonistas.

Aun recuerda sus inicios como “cura youtuber”: “El primer video que subí alcanzó las 2.000 visitas; entonces yo quedé muy contento pues son 2.000 personas y no sólo de la ciudad. Se me hizo muy buena idea compartir lo que hago en la misa, también a través de la parroquia", expresó Sergio Argüello.

Hablar de Dios a la gente

Este sacerdote explica que “lo que trato siempre es hablar del corazón y saber que la persona que me está viendo necesita de Dios, no necesita de un maestro que le enseña cosas, sino de un sacerdote que le comparta a Jesús, entonces son a partir de la oración y de la persona que está del otro lado quiere escuchar de Jesús”.