Las autoridades chinas vuelven a detener al padre Liu Honggeng, que ya pasó 8 años en prisión
El padre Liu Honggeng, vicerrector del santuario y de la parroquia dedicada a María Reina de China en Baoding (provincia central del Hebei), fue arrestado por las autoridades locales, que lo habían tenido en custodia el 7 de mayo pasado para prevenir peregrinaciones a su iglesia. Las recientes declaraciones de Xi Jinping al Frente Unido sobre las religiones han reforzado las posiciones extremistas de las autoridades locales, que ahora se sienten en derecho de hacer lo que mejor consideren. Una fuente local anónima confirmó el arresto a la agencia católica AsiaNews.
El padre Liu, explica la fuente, “se preparaba para el mes de María, muy sentido por los católicos chinos y por aquellos de Baoding en manera particular. En la diócesis hay unos 500.000 fieles, entre la Iglesia oficial y la no oficial y todos tienen una gran devoción a la Virgen. Hay más de 70 sacerdotes y la pastoral es muy viva, no obstante las problemáticas relacionadas con la persecución. Es praxis que en esta zona se hagan arrestos o detenciones preventivas, dado que es un bastión de la Iglesia no oficial. Pero no creíamos que el padre Liu fuese a ser arrestado otra vez”.
El sacerdote ya estuvo 8 años en la prisión, condenado sin proceso en 2006 por haberse negado a inscribirse en la iglesia oficial controlada por el Partido Comunista, la Asociación Patriótica de los Católicos Chinos.
“Él -continúa la fuente- es un buen pastor y una buena persona. Sus parroquianos han pedido por él desde que desapareció, pero sin suceso. Esperamos y rezamos para que vuelva pronto entre nosotros. Había sido liberado sólo el mes de agosto pasado”.
Sobre el motivo del arresto, la fuente de AsiaNews, explica: “Las recientes afirmaciones de Xi Jinping sobre la necesidad de tener religiones “chinas”, sin “influencias extranjeras”, han dado nueva fuerza a las franjas más extremistas de la Asociación Patriótica de los Católicos Chinos. Antes estaban a la espera de entender las nuevas directrices, pero ahora se sienten legitimados por el nuevo líder”.
Un gran altar demolido, hiriendo feligresas
En la misma diócesis, las autoridades han demolido un altar de 8 metros por 6, construido en febrero por un grupo de católicos locales. Unos 40 agentes, escribe la agencia Ucan, han realizado la operación sin advertir a los fieles y sin los documentos necesarios. Dos mujeres, fieles laicas, han tratado de impedir la destrucción y fueron heridas en la refriega.
Doce días de cárcel para un veterano obispo
Siempre en el Hebei, pero en la diócesis de Zhending, las autoridades en cambio han liberado después de 12 días de prisión al obispo, monseños Julio Jia Zhiguo, que tiene una larga historia de arrestos y liberaciones a sus espaldas. El prelado había ordenado a algunos sacerdotes en abril, pero pudo celebrar la solemnidad de Pentecostés, el pasado 24 de mayo con sus fieles.