Las mujeres que abortan multiplican por 6 su tasa de suicidio respecto a las que dan a luz su bebé
Provocarse un aborto va ligado a un mayor riesgo de suicidio, según recoge la evidencia científica, analizada en una exhaustiva revisión de estudios a cargo del doctor Gregory Pike, investigador médico australiano del Adelaide Centre for Bioethics and Culture (www.bioethics.org.au) y asesor en temas bioéticos del Gobierno federal australiano.
El informe (véalo aquí, 28 páginas en PDF en inglés) constata los distintos riesgos para la salud de la mujer que se provoca un aborto, comparados con los de las mujeres que dan a luz. Después de 50 años de abortos legales en distintos países ricos de Occidente y con medicina moderna es posible establecer algunos hechos.
Riesgo de suicidio: se multiplica por 6
Uno de los datos más contundentes es que “el suicidio es alrededor de seis veces mayor tras el aborto que tras dar a luz”.
Además, “las mujeres tienen más probabilidades de morir tras un aborto en comparación con dar a luz”. “El aborto está asociado con tasas significativamente mayores de muerte para las mujeres hasta diez años tras un aborto, en comparación con mujeres que dan a luz”, afirma el informe.
Las mujeres que abortan además se ven expuestas a un “dolor significativo” tres años después del aborto, así como a un 30% de incremento de riesgo de depresión y 25% de riesgo de mayor ansiedad.
El riesgo de desorden en salud mental crece un 30%
Otro hallazgo de la investigación, indica SPUC, es que “las mujeres que han tenido abortos experimentan desórdenes de salud mental 30% más a menudo comparado a las mujeres que no han tenido un aborto”.
Las mujeres que se han sometido a abortos experimentan con frecuencia además depresión, ansiedad y desorden de estrés post traumático en siguientes embarazos.
En Inglaterra ha difundido el estudio Antonia Tully, directora de campañas de la asociación provida SPUC (www.spuc.org.uk), quien criticó que “al lobby pro aborto y a la industria del aborto, que obtiene millones de libras del contribuyente por realizar abortos financiados por el Estado, no parece interesarle el impacto del aborto en las mujeres o se rehúsan a mirar el impacto que tiene”.
Tully subrayó que “a nosotros realmente nos importa que las mujeres que tienen un aborto experimentan problemas de salud mental 30% más a menudo en comparación con las mujeres que dan a luz”. “Importa mucho para nosotros que el riesgo de suicidio es aproximadamente seis veces mayor tras un aborto que tras un parto”, insistió.