Con el «sí» de Roma y el «no» del obispado: cientos de católicos rezan «por la unidad» en Alemania

Cientos de personas sacaron en procesión a la Virgen de Fátima en el distrito de Harburg, en Hamburgo, la segunda ciudad más populosa de Alemania, en la que los católicos son algo más de 170.000; es decir, aproximadamente el diez por ciento de la población.

La convocatoria la cursó, como todos los años, la misión portuguesa; pero en esta ocasión se sumaron diversas iniciativas de comunidades extranjeras en Hamburgo. Varinia Arauco, peruana madre de tres niños y residente desde hace mucho tiempo en Hamburgo, diseñó un folleto, en el que se podían leer las intenciones de la procesión: “Por la unidad de la Iglesia católica. Por una Europa cristiana. Por la protección de la familia. Por la paz”.

Como comentaba al autor de estas líneas, el pasado año, algunos católicos de lengua española rezaron el rosario en la calle. Estaban preocupados porque en Hamburgo se había comenzado a bendecir parejas homosexuales y deseaban rezar por la unidad de la Iglesia católica: “En Hamburgo hay una división en la Iglesia; algunos toman partido por el Camino Sinodal, pero muchos otros, que hasta ahora eran “invisibles”, rezan por la unidad. No quieren un cisma”.

Por la unidad de la Iglesia 

Otro de los grupos que participaron en la procesión fue el del movimiento “Wojownicy Maryi” (“Caballeros de María”). Comenzaron a rezar en Polonia el “Rosario de hombres”, que ya se ha extendido a 35 países. En Hamburgo lo rezan el primer sábado de mes, según relatan Patrick y Robert. Vienen desde una población cercana a la ciudad de Münster hasta Hamburgo para rezar con otras personas; su intención es: “Conocer mejor a Jesús con los ojos, los pensamientos y el corazón de la Virgen”. Para ello recomiendan, además del rosario, la asistencia a la Santa Misa y la confesión. “Además, queremos reparar las ofensas que se hacen a Jesús y a su Santísima Madre”.

También han acudido los hombres del movimiento “Christ for Men”. Philipp Dunkel y Edson Armenta convocaron el pasado año por primera vez a hombres para rezar delante de la catedral católica de Hamburgo: asistieron unos 50. “Rezamos por la unidad de la Iglesia, pero también por la protección de la vida humana desde su concepción natural hasta la muerte natural.

La unidad de la Iglesia, la protección de la vida o el redescubrimiento de la fe, algunas de las intenciones y objetivos de este rosario público rezado en las calles de Hamburgo. 

El rosario de “Christ for Men” se centra en la veneración del Sagrado Corazón de Jesús, dice Philipp Dunkel. También conceden importancia a que esta iniciativa tenga asimismo un efecto catequético, que los hombres conozcan mejor el Catecismo de la Iglesia católica.

Con la iniciativa, quieren ayudar a los hombres a descubrir... o redescubrir la fe católica. “Seguimos la tradición católica –añade Edson Armenta–. Nuestra iniciativa es una llamada a la conversión personal”. De momento se han propuesto rezar un rosario “virtual”: “lo rezamos cada 14 días a través de la red social Telegram”.

Reconocido por el Papa... pero resistido por el arzobispado

La esposa de Philipp Dunkel, Ivette, procedente del Perú, también acudió a la procesión del rosario con su grupo “Rosario de los niños”. Nos explica cómo este movimiento lo inició Blythe Kaufman en 2011 en West Hartford (Connecticut). “Comenzamos el Rosario de los Niños en Hamburgo; pero nos topamos con resistencia por parte de varios párrocos que no entienden que los niños recen el rosario”. Sin embargo, el movimiento de Blythe Kaufman “está reconocido por el Papa, y varios cardenales como Robert Sarah y Raymond Burke lo respaldan”.

También la procesión del rosario encontró resistencia. En su invitación habían escrito: “Con el Santo Rosario, recordamos la intercesión de nuestra Santísima Madre, Nuestra Señora del Rosario, cuando concedió la victoria a la Europa cristiana sobre el Imperio Otomano en la batalla de Lepanto el 7 de octubre de 1571”.

Cientos de personas acudieron a un rosario público en Alemania marcado por la división de la Iglesia en el país europeo:  avalados por roma, pero resistidos por no pocos  obispos alemanes. 

La mención de la batalla de Lepanto hizo saltar las alarmas en el Vicariato General del Arzobispado, desde donde se envió una carta a las parroquias de Hamburgo para que no apoyaran la llamada a la oración: “Situar hoy una procesión del rosario en el contexto militar de la batalla de Lepanto es completamente inaceptable”.

Sin embargo, hubiera bastado con echar un vistazo al misal para reconocer el contexto. En el misal alemán se dice: “7 de octubre. Nuestra Señora del Rosario: la fiesta fue introducida por el Papa dominico Pío V en 1572 para conmemorar la victoria sobre los turcos en la batalla naval de Lepanto (7 de octubre de 1571)”.

El responsable de la misión portuguesa, Padre Sérgio Santos Reis, nos dice que todo el mundo está invitado a la procesión de Fátima. “No estamos organizando una manifestación política. Estamos ejerciendo nuestro derecho a profesar públicamente nuestra fe”.

Así lo corrobora Varinia Arauco: “No queremos hacer política, sino demostrar nuestra fe. Seguiremos rezando por una Europa cristiana y por la unidad de la Iglesia católica en Alemania”.