Mensaje de los obispos y los líderes protestantes de Europa: «Trabajamos para la reconciliación»
El Consejo de Conferencias Episcopales de Europa y la Conferencia de las Iglesias Europeas han publicado un mensaje conjunto con ocasión de la Semana de oración por la unidad de los cristianos. El mensaje, recogido por la revista Zenit, está dirigido a continuar el camino de unidad que intentan mantener protestantes y católicos.
Tiempo de unidad
El mensaje remarca la necesidad de "tender puentes" por medio de la oración y testimonios comunes. Aunque el camino pueda no parecer claro o sencillo, indican, tenemos siempre en el corazón esa verdad por la que "el Amor de Cristo nos apremia".
Así, recuerdan también que la historia del cristianismo en Europa “ha estado marcada por dolorosos periodos de división, condena mutua e incluso violencia”. Por eso subrayan que hemos de enfrentarnos a nuestro difícil pasado para renovar nuestro empeño en la reparación de heridas y la superación de divisiones.
Cristo, el principal punto en común
Aseguran en el comunicado que “nos dirigimos a Cristo, que reconcilia todos los pueblos y a la creación con Dios, con el fin de que nos guíe en esta tarea”. Con humilde gratitud por el don recibido –indica el mensaje– "trabajamos para la reconciliación a través de las palabras y nuestras acciones".
La adoración a Cristo es el principal punto de unión entre Católicos y Protestantes
Medio siglo de colaboración
Al mismo tiempo, los presidentes de ambas instituciones observan que hoy celebramos también “el crecimiento en la colaboración y el fomento de un significativo diálogo teológico”. Tal y como se recuerda en el mensaje, ambas instituciones colaboran desde hace 45 años a través del Comité Conjunto en numerosos ámbitos de interés común.
Mensaje de esperanza
Asimismo, recuerdan que “nuestra solidaridad hacia las minorías como la comunidad gitana, nuestro empeño en la justicia ecológica y las iniciativas de oración para alcanzar la unidad dentro del Cuerpo de Cristo” han sido consolidados a través de dicha relación.
Finalmente, el mensaje señala que las múltiples crisis que Europa y los Estados vecinos han sido llamados a afrontar “nos acercan todavía más”. Guerras y conflictos, incertidumbre política, migración y desafíos ecológicos, pobreza material y espiritual, “tocan la vida de todos en Europa”.
Ambas instituciones muestran su preocupación por las grandes crisis que Europa está atracesando
Con estas crisis, sin embargo, “llega también la esperanza”. Juntos –subrayan– podemos anunciar el Amor de Cristo para la reconciliación a través de la protección de la Creación, la solidaridad hacia los más necesitados y la tutela de la dignidad del pueblo de Dios.