Tatarstán reconstruye su catedral a la Virgen de Kazán
El icono más importante de Rusia vuelve a donde la Virgen lo entregó mediante un sueño a una niña
Kazán, la capital de Tatarstán (o Tartaristán), una ciudad con un millón de habitantes, a partes iguales rusos ortodoxos y tártaros musulmanes, va a construir una nueva catedral ortodoxa para albergar allí el icono de la Virgen de Kazán, que Juan Pablo II entregó al Patriarca de Moscú en 2004, después de haber pasado todo tipo de peripecias tras la Segunda Guerra Mundial.
Este icono mariano va ligado a los grandes momentos de la historia rusa y europea: ante él rezó el General Kutuzov antes de derrotar a Napoleón, y se exhibió y sacó en procesión en pleno comunismo stalinista, durante la Segunda Guerra Mundial, en Leningrado y Stalingrado, cuando al ateo régimen soviético no le importó solicitar la intercesión de la Madre de Dios contra el invasor nazi.
El general Kutuzov reza ante la Virgen de Kazán, escena recogida en Guerra y Paz y las películas basadas en ella
Los arqueólogos buscan el punto exacto
Los arqueólogos están revisando el lugar donde se construirá la nueva catedral, que es donde se halló el icono en el siglo XVI, y donde antaño se alzó un monasterio femenino y una catedral dedicados a la Virgen, junto al kremlim (fortaleza) de la ciudad. Este complejo fue destruido por los soviéticos en varias fases.
La catedral anterior, levantada a principios del s. XIX, había sustituido la envejecida iglesia anterior, del siglo XVII. El territorio del monasterio ocupaba varias hectáreas y por su tamaño y riqueza no tenía rivales en todo el valle del Volga. Antes de la revolución del 1917, allí vivían unas 500 monjas.
Después de la revolución, aunque el monasterio se cerró, durante los años 20 seguía existiendo una comunidad ortodoxa oficialmente registrada. En 1931 la comunidad fue trasladada a otro templo, y la mayor parte del antiguo monasterio fue derribado. Después se usó el edificio como fábrica de tabacos, otra parte del edificio se usó como bloques de vivienda y otro templo del complejo fue una facultad de la Universidad Pedagógica de Kazán.
En noviembre de 2015, el presidente de Tatarstán Rustam Minnijánov firmó la resolución de la reconstrucción de la Catedral del Icono de Nuestra Señora de Kazán, el inicio de las obras está previsto para el 21 de julio de 2016, aniversario de la aparición del icono milagroso.
Los arqueólogos están buscando el lugar del antiguo altar para colocar allí el nuevo. El punto exacto es importante: se supone que allí fue donde se encontró el milagroso icono. La zona en años recientes estaba marcada con una pequeña capillita que se está desmontando.
Dos cuadros que recogen procesiones con la Virgen de Kazán durante la Segunda Guerra Mundial... con el beneplácito del régimen comunista
La niña que soñó con la Virgen
En 1579, un incendio devastó una parte del kremlin y los barrios adyacentes de la ciudad de Kazán. Una niña, la hija del arcabucero Daniel Onúchin, llamada Matrona, vio en un sueño a la Virgen que le pedía recuperar un icono enterrado en los años del dominio musulmán por cristianos oprimidos.
La niña intentó persuadir a los mayores a que fueran a buscar el icono, pero nadie le hizo caso. Tres veces tuvo que venir la Madre de Dios en sueños a la niña para indicar el lugar del ocultamiento de la imagen.
La tercera vez la niña soñó que el icono mismo que parecía decir: “Si no sigues mis palabras, apareceré en otro lugar, pero tú perecerás”. Entonces la madre de la niña, asustada, llevó a su hija ante el arzobispo Jeremías y los jefes militares de la ciudad, pero tampoco le creyeron.
Al final, el 8 de julio, la madre con unas amigas, siguiendo las indicaciones de la pequeña Matrona, se pusieron a cavar. Pero sólo cuando la niña misma tomó la pica y se puso a buscar al lado de un horno, apareció el icono de la Virgen envuelto en una vieja manga de paño. La cara de la imagen era clara, parecía recién pintada y no estropeada por el fuego.
Al saberse la noticia, el arzobispo y los jefes de la ciudad vinieron en procesión y llevaron el icono a la iglesia de San Nicolás y después de una solemne liturgia, la colocaron por fin en la catedral de la Anunciación. Durante la procesión se curaron dos ciegos: José y Nikita. Por orden del zar, que era el famoso Iván el Temible, se fundó el monasterio en honor del icono recién encontrado, y sus primeras monjas fueron Matrona y su madre.
Bajo estas líneas, procesión con el icono de la Virgen de Kazán en Leningrado durante la Segunda Guerra Mundial
Itinerarios del icono
En Rusia existieron dos copias veneradas de este icono: la de Moscú (para guardarla se construyó la iglesia de Kazán en la Plaza Roja de Moscú, frente al Kremlin y las populares cúpulas multicolores de San Basilio) y la de San Petersburgo (para la que se construyó la Catedral de Nuestra Señora de Kazán, una réplica clásica de San Pedro de Roma en miniatura... que los comunistas usarían durante décadas como Museo del Ateísmo).
Templo de Nuestra Señora de Kazán en la Plaza Roja de Moscú
Templo de Nuestra Señora de Kazán en San Petersburgo; los comunistas lo usaron como Museo del Ateísmo, pero vuelve a ser lugar de oración
Los dos iconos son famosos por su ayuda brindada a las armas rusas. En Moscú, en 1611, el icono precedió la entrada de las tropas de los milicianos rusos en el kremlin tras la batalla contra los invasores polacos. Ante el de San Petersburgo, en 1812, el general Mijail Kutuzov, comandante de los ejércitos rusos contra Napoleón, pidió su protección y bendición para su causa y venció a los invasores. La escena emocionante del achacoso general arrodillándose ante el icono junto a miles y miles de soldados se recoge en la novela "Guerra y Paz" y en las teleseries y películas inspiradas por ella.
El Papa Francisco y el Patriarca Kirill en su histórico encuentro en Cuba... con un icono de la Virgen de Kazán
El icono perdido
Por desgracia, el icono original encontrado en el siglo XVI desapareció en 1904: fue robado de la catedral del monasterio de Nuestra Señora de Kazán por un joven ladrón de iconos profesional apellidado Chaikin. El malhechor fue capturado pero declaró que había cortado el icono en tablas y lo quemó en el horno porque sólo le interesaba la riza (cobertura del icono que deja a la vista solo el rostro) que era de oro. La investigación criminal descubrió en el domicilio del ladrón las cenizas mezcladas con clavos, restos de imprimación y hasta con perlas diminutas…
Pero para entonces ya había copias y adaptaciones de este icono de la Virgen con Niño por doquier, incluso en iglesias católicas donde se le veneraba con el nombre de María Reparadora.
Juan Pablo II con el icono que devolvería al Patriarcado de Moscú
La conexión con Fátima
El icono que Juan Pablo II devolvió al Patriarca se pintó en Rusia a finales del siglo XVII o principios del XVIII. No se sabe en qué monasterio se guardaba, pero apareció en Occidente después de la revolución bolchevique de 1917. Apareció en una subasta en EEUU y lo compró un inglés. Cuando murió este propietario, se subastó de nuevo y lo compró esta vez, en 1970, el Ejército Azul, una organización católica mariana muy fuerte en EEUU dedicada a promover los mensajes y la espiritualidad de la Virgen en Fátima.
"En Fátima la Virgen pidió que rezáramos por la conversión de Rusia y prometió que al final su Corazón Inmaculado triunfará", recuerdan sus devotos. El Ejército Azul hizo posible la veneración pública del icono ruso entre los católicos y organizó una gran campaña de oración por todo el mundo siguiendo las peticiones de Fátima.
El icono de la Madre de Dios de Kazán llegó con el Ejército Azul al santuario de Fátima en Portugal y le pusieron una capilla justo detrás del santuario de la Virgen de Fátima con la intención de ser devuelto a Rusia cuando se convirtiera. Fue durante añosfue un gran signo de la conexión entre las apariciones de Fátima y Rusia.
En 1993 entregaron el icono a Juan Pablo II, que lo mantuvo más de 10 años en los apartamentos papales. El Papa tenía el ardiente deseo de ir a Rusia y entregárselo personalmente al patriarca ortodoxo ruso de Moscú.
El santo Papa polaco junto al histórico icono ruso
El regalo de Juan Pablo II
No pudiendo lograrse su sueño de ir a Rusia, el Papa decidió enviar el icono a "nuestro hermano el patriarca Alexis II y a través de él a la Santa Iglesia Ortodoxa Rusa y a todo el pueblo ruso". El 25 de agosto de 2004, después de un solemne acto de despedida y veneración al que asistieron 7.000 peregrinos, Juan Pablo II entregó a una delegación vaticana el icono de la Madre de Dios de Kazán para que lo llevara el 28 de agosto al patriarca ruso.
Esta es la copia que hoy se venera, la llamada “copia vaticana”, a la que rinden culto los monjes del nuevo monasterio masculino, y parroquianos y peregrinos de toda Rusia, y la que se conocará en la nueva catedral de Tatarstán.
(Con información de Pravmir.ru traducida del ruso por Tatiana Fedótova; publicado originariamente en www.carifilii.es)