Rouco avisa: «Defender la vida y la familia no puede depender de una mayoría sociológica y política»
Este lunes se presentó en Madrid el último libre del cardenal Rouco Varela, arzobispo emérito de Madrid, y que se titula La familia ante el reto de la secularización (BAC). La presentación estuvo a cargo de Rafael Sánchez Saus, director del Congreso de Católicos y Vida Pública, y de monseñor Martínez Camino, obispo auxiliar de Madrid.
Durante el acto, aunque no entró en una crítica directa al nuevo Ejecutivo, el purpurado sí advirtió que “defender la vida y la familia no puede depender de una mayoría sociológica y política” puesto que esto supondría estar sometidos “a riesgos enormes”.
Tal y como recoge Vida Nueva, el cardenal Rouco señaló en su intervención que el “intento de suprimir la institución familiar y matrimonial la hizo Lenin y fracasó”. También mencionó el Mayo del 68 donde “aquellos jóvenes querían conocer la verdad, otra cosa es que fueran consecuentes con ellos. Al no ser consecuentes venían los dramas. La movida de los 80 y la drogadicción masiva no fue fruto de la casualidad”.
El papel de los católicos en la vida pública
De este modo, sobre la crisis de la familia, Rouco habló de un “callejón sin salida” por lo que animó a los católicos a promover este debate en la vida pública. Por ello, también advirtió del peligro de que “la Iglesia no viva la fe y las grandes virtudes teológicas humanas”.
Sin embargo, el arzobispo emérito de Madrid también quiso recalcar que “no es verdad que todos los jóvenes no quieran saber nada de Dios. Y destacó “una minoría muy cualificada en número y en calidad”.
Tal y como recoge igualmente Eclessia, “no hay que limitarse a hacer sociología a través de las estadísticas”, respondió Rouco Varela a la pregunta del número de matrimonios rotos en España, donde 2 de cada tres acaban en fracaso, "siempre surgirá la acción de la gracia de Dios y con la fuerza de todos los que formamos el pueblo De Dios, no solo los pastores sino también con el compromiso de los fieles”.
Por último, quiso destacar que “a la hora de valorar el magisterio de la Iglesia hay que tener en cuenta el fondo y al forma. Hay que saber interpretar los hilos de los tiempos que no pueden tampoco cambiar la realidad que desde la verdad de la fe nos invita a evangelizar”.