Domingo de Ramos novedoso: en Barcelona, Alicante y Elche llegan las palmas de colores pastel

Hasta los sectores más tradicionales se ven obligados a innovar para captar nuevos clientes. Tanto es así que varios talleres artesanos de palma blanca de Elche se han lanzado a pintar de colores las palmas de Domingo de Ramos, que siempre han sido blancas, para ampliar su mercado con nuevos productos.

La idea surgió hace unos años de una vendedora de palma blanca de Barcelona, explican desde el sector ilicitano. En Cataluña también hay mucha tradición de palma blanca en Semana Santa, y las decoraciones tienen más importancia que en la provincia.

Así, los catalanes pensaron en cómo innovar en la decoración, y se les ocurrió la idea de pintar las palmas de colores, para, además, aprovechar, de un año para otro, el producto que no se vende en la temporada, y que tampoco compran las parroquias para elaborar la ceniza del Miércoles de Ceniza.

La artesana ilicitana Ana Mora, del Taller Palma Blanca, explica que «la idea la propuso una vendedora del mercado de la Sagrada Familia de Barcelona, y consiste en pintar las palmas de colores pastel cuando están secas, ya que es así cuando cogen mejor la pintura. Pintar las palmas tiernas es más complicado».

Las primeras palmas de colores se realizaron, por tanto, en Barcelona, pero su buena acogida entre el público ha provocado que los pedidos hayan llegado hasta la ciudad de las palmeras, desde donde se abastece a grandes superficies, que este año las han puesto a la venta en algunos puntos de la provincia.

De esta forma, y para sorpresa de muchos, durante estos días se pueden adquirir palmas rosas, azules, naranjas y verdes, y de distintos tamaños, en grandes superficies de Alicante y Elche, como, por ejemplo, Carrefour y El Corte Inglés.



Sorpresa de los clientes
La reacción de los clientes es de sorpresa. «¡Una palma rosa!», exclamaba ayer una mujer en El Corte Inglés de Elche, que no salía de su asombro, mientras otra curioseaba sus precios, entre 10 y 30 euros.

Los ilicitanos ven simpática la iniciativa, que sirve para dar un nuevo aire, y color, al Domingo de Ramos, pero, a la vez, se muestran un poco reacios a comprar este nuevo producto.

De hecho, entre los propios artesanos ilicitanos hay división de opiniones, y son muy pocos los talleres en los que se elabora.

«Nosotros nos opusimos cuando surgió la idea, y nunca lo hemos hecho. Defendemos la tradición de la palma blanca», admitía ayer la artesana de la palma blanca Paqui Serrano, mientras que Ana Mora decía que «en nuestro taller la hacemos por encargos que nos llegan de Cataluña, y para grandes superficies, que las reparten por varios puntos del país. Nunca las hemos preparado para vender en los puestos que ponemos en la provincia durante los días previos al Domingo de Ramos».

De esta forma, han tenido que ser las grandes superficies las que han ofrecido, por primera vez, la palma de Domingo de Ramos teñida de colores en la provincia, por lo que las mareas blancas, que llenan las calles el 20 de marzo en ciudades como Elche y Alicante, es probable que empiecen a tener puntos de color.

Al ser palma seca, su elaboración es distinta
La elaboración de la palma de color para el Domingo de Ramos arranca al principio de la temporada. El hecho de que se realice con palma seca permite a los talleres trabajar con más antelación, y llegar antes a los mercados.

Para teñir las palmas se utiliza una pintura específica, para que se adhiera bien a la palma, ya que su textura requiere de un producto especial.