Manuel López, diácono de la diócesis de Cádiz y Ceuta con un hijo sacerdote, es el autor
Amplia encuesta a los diáconos permanentes en España: «Una vocación emergente... cada vez somos más»
En España hay actualmente 584 diáconos permanentes, de los cuales 307 (un 52,75%) han respondido a la encuesta planteada por uno de ellos, Manuel López López, de la diócesis de Cádiz y Ceuta. El estudio es metodológicamente muy ajustado a la realidad de este ministerio, pues tiene su origen en un chat que los agrupa en buen número, al que supo movilizar para que, diócesis por diócesis, el cuestionario llegase a todos o sirviese para recabar información valiosa.
Diácono 24 horas al día
El prólogo es del arzobispo de Toledo, Francisco Cerro, amigo de juventud del autor, en quien agradece a todos los diáconos el "servicio impagable" que prestan a la Iglesia "junto a su familia" y "con grandes sacrificios", causando asombro "tanta entrega y generosidad".
En efecto, como dice el propio López en la introducción, a pesar de que la mayoría están casados y son laboralmente activos, "el diaconado no es solo una función eclesiástica, no es celebrar un bautismo o una boda o dar catequesis, se es diácono las 24 horas del día": "La gratuidad, generosidad y humildad son características propias del que sirve".
En primer término, Antonio Jesús López, sacerdote, y detrás Manuel López, su padre, diácono permanente. Foto: Diácono, diaconado, diakonía.
Manuel fue ordenado diácono permanente el 10 de febrero de 2008. Tiene dos hijos, el mayor, Antonio Jesús, que es sacerdote, ordenado en 2013, y el pequeño, padre de familia, que le ha dado una nieta.
Casados, en activo, de formación universitaria
A través de un grupo de WhatsApp de los diáconos de España, fueron compartiendo experiencias y reflexiones hasta que se planteó la posibilidad de un estudio basado en la información proporcionada por cada uno de ellos, sobre sí mismo o sobre los diáconos de su diócesis.
En diciembre de 2021 empezaron a recopilar datos que iban actualizando, y en julio de este año enviaron un formulario a todos para ofrecer un perfil del diaconado permanente en España. Para realizar el formulario pidieron los permisos oportunos a nivel diocesano.
Durante los meses de agosto y septiembre fueron recibiendo las respuestas, que han estructurado y publicado ahora bajo el título El diaconado en España, que firma Manuel López López con la colaboración de Andrés Cebrino, diácono de Sevilla.
Según dicho estudio, en España hay 584 diáconos permanentes. Esta figura, que había ido cayendo en desuso a partir del siglo V, renació tras el Concilio Vaticano II con una carta apostólica de Pablo VI de 18 de junio de 1967, Sacrum Diaconatus Ordi.
El primer ordenado en España fue Luis Nadal Padró, el 8 de noviembre de 1980, de la archidiócesis de Barcelona, ya fallecido, y se fueron incorporando a lo largo de las décadas posteriores 54 diócesis. Actualmente, 55 de las 70 diócesis españolas (un 79%) tienen instaurado el diaconado permanente.
Las diócesis con mayor número son Sevilla (54), Madrid (51) y Barcelona (49), seguidas por Valencia (40), Tarrasa (24), Sant Feliu de Llobregat (23), Málaga (23), Asidonia-Jerez (21), Mallorca (24) y Huelva (17).
Las quince diócesis que no tienen ninguno son la archidiócesis castrense, Astorga, Barbastro-Monzón, Cartagena, Ciudad Real, Córdoba, Guadix, Huesca, Jaca, Lugo, Mérida-Badajoz, Mondoñedo-Ferrol, Osma-Soria, Segovia y Sigüenza-Guadalajara.
"Los datos dicen que el diaconado es una vocación emergente. Cada vez somos más", apunta López, y así lo apunta, en efecto, la gráfica de tiempo de servicio de los 307 diáconos que respondieron al formulario: 175 (el 57%) llevan menos de diez años, lo que indica -si lo unimos a la descristianización de la sociedad española y a la caída de vocaciones sacerdotales- un crecimiento muy acusado en términos proporcionales.
La mayoría de los nuevos diáconos han sido ordenados en tiempos recientes.
Por estado civil, el 91% son casados, por un 7% célibes y un 2% viudos.
Por situación laboral, el 53% son activos, el 42% jubilados y el 5% parados.
En cuanto a la profesión de los activos, destaca claramente la docencia, con un 27% de diáconos que son profesores, seguidos de los que trabajan en tareas diocesanas (11%) y los funcionarios (9%).
En cuanto a estudios, un 61% de los que respondieron son licenciados universitarios (61%) y un 5% doctores.
Todos tienen algún tipo de estudios eclesiásticos, el 80% con titulación y un 20% sin ella. Sin embargo, en un 29% de las respuestas se afirma que no hay en la diócesis un plan de formación propio para los diáconos.
Los datos recabados por el estudio muestran elementos susceptibles de mejora:
-un 37% se consideran poco o nada integrados en la diócesis;
-un 73% consideran que la figura del diácono es poco o nada conocida en la diócesis.
En cuanto a las tareas que realizan, son, por este orden, la pastoral parroquial, el consejo parroquial, la atención a los enfermos (llevar la Eucaristía), la catequesis, Caritas, las exequias y la liturgia.