Lunes, 23 de diciembre de 2024

Religión en Libertad

Discutían quién era el más importante

ReL

St 4,1-10

Queridos hermanos:
¿De dónde proceden las guerras y las contiendas entre vosotros?
¿No es de vuestras pasiones, que luchan en vuestros miembros?
Codiciáis y no tenéis;
matáis, ardéis en envidia y no alcanzáis nada;
os combatís y os hacéis la guerra.
No tenéis, porque no pedís.
Pedís y no recibís, porque pedís mal,
para dar satisfacción a Vuestras pasiones.
¡Adúlteros!
¿No sabéis que amar el mundo
es odiar a Dios?
El que quiere ser amigo del mundo,
se hace enemigo de Dios.
No en vano dice la Escritura:
«El espíritu que Dios nos infundió
está inclinado al mal».
Pero mayor es la gracia que Dios nos da.
Por eso dice la Escritura:
«Dios se enfrenta con los soberbios
y da su gracia a los humildes».
Someteos, pues, a Dios
y enfrentaos con el diablo,
que huirá de vosotros.
Acercaos a Dios
y Dios se acercará a vosotros.
Pecadores, lavaos las manos;
hombres indecisos, sed sinceros,
lamentad vuestra miseria,
llorad y haced duelo;
que vuestra risa se convierta en llanto
y vuestra alegría en tristeza.
Humillaos ante el Señor,
que él os levantará.

Sal 54,7-8.9-10a.10b-11a.23

Encomienda a Dios tus afanes, que el te sustentará.

Pienso: ¡Quién me diera alas de paloma
para volar y posarme!
Emigraría lejos,
habitaría en el desierto.

Me pondría en seguida a salvo de la tormenta,
del huracán que devora, Señor,
del torrente de sus lenguas.

Veo en la ciudad violencia y discordia:
día y noche hacen la ronda
sobre sus murallas.

Encomienda a Dios tus afanes,
que él te sustentará;
no permitirá jamás
que el justo caiga.

Mc 9,30-37

En aquel tiempo, Jesús y sus discípulos se marcharon de la montaña y atravesaron Galilea; no quería que nadie se enterase, porque iba instruyendo a sus discípulos.

Les decía:
-«El Hijo del hombre va a ser entregado en manos de los hombres, y lo matarán; y, después de muerto, a los tres días resucitará.»

Pero no entendían aquello, y les daba miedo preguntarle. Llegaron a Cafarnaún, y, una vez en casa, les preguntó:
-«¿De qué discutíais por el camino?»

Ellos no contestaron, pues por el camino habían discutido quién era el más importante.

Jesús se sentó, llamó a los Doce y les dijo:
-«Quien quiera ser el primero, que sea el último de todos y el servidor de todos.»

Y, acercando a un niño, lo puso en medio de ellos, lo abrazó y les dijo:
-«El que acoge a un niño como éste en mi nombre, me acoge a mí; y el que me acoge a mí no me acoge a mí, sino al que me ha enviado.»

Comentarios
5€ Tu donativo es vital para mantener Religión en Libertad
10€ Gracias a tu donativo habrá personas que podrán conocer a Dios
50€ Con tu ayuda podremos llevar esperanza a las periferias digitales
Otra cantidad Tu donativo es vital para mantener Religión en Libertad
Tu donativo es vital para mantener Religión en Libertad
Si prefieres, contacta con nosotros en el 680 30 39 15 de lunes a viernes de 9:00h a 15:30h
Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter

¡No te pierdas las mejores historias de hoy!

Suscríbete GRATIS a nuestra newsletter diaria

REL te recomienda