El voto católico se inclinó por Trump, invirtiendo lo sucedido en las dos elecciones de Obama
Tanto en 2008 como en 2012, los católicos votaron en mayor proporción a Barack Obama que a John McCain y Mitt Romney, respectivamente. Sin embargo, en el histórico 8 de noviembre de 2016, se decantaron en mayor número por Donald Trump frente a Hillary Clinton.
Juanjo Romero detalla este proceso en Infocatólica al analizar los datos del Pew Research Center sobre la segmentación del voto en las elecciones presidenciales del pasado martes.
He aquí la gráfica que resume el significativo y decisivo vuelco en el voto católico estadounidense:
El dato es "tumbador", destaca Romero: un 52% de los católicos votó a Trump y un 45% a Clinton.
En el caso de los católicos blancos la diferencia se amplía: 60% por Trump, 37% por Clinton. Sin embargo, en el caso de los católicos latinos sí ganó Hillary: 26% por Trump y 67% por Clinton, en cualquier caso una diferencia menor entre los latinos católicos que en la media de los latinos.
La significación de la religión en esa comunidad es clara si se compara los resultados de 2016 con los de hace cuatro años. Entonces, el 59% de los católicos blancos votaron al candidato republicano (sólo 1 punto menos que ahora), mientras que entre los católicos hispanos ese 67% de voto a Clinton es ocho puntos inferior al 75% que cosechó Obama.
El desprecio manifestado por el equipo de Hillary Clinton a los católicos y la indisimulada connivencia entre la multinacional del aborto y la candidata demócrata parecen haberle pasado factura.
Voto en las elecciones según la asistencia a algún servicio religioso: al menos una vez a la semana, mensualmente, varias veces al año o nunca.
Y una tendencia parecida se ve, como refleja la gráfica anterior, en cuanto a la práctica religiosa en general, católica o no: 56% Trump y 40% Clinton entre los más practicantes, 62% Clinton y 31% Trump entre los menos.
Juanjo Romero detalla este proceso en Infocatólica al analizar los datos del Pew Research Center sobre la segmentación del voto en las elecciones presidenciales del pasado martes.
He aquí la gráfica que resume el significativo y decisivo vuelco en el voto católico estadounidense:
El dato es "tumbador", destaca Romero: un 52% de los católicos votó a Trump y un 45% a Clinton.
En el caso de los católicos blancos la diferencia se amplía: 60% por Trump, 37% por Clinton. Sin embargo, en el caso de los católicos latinos sí ganó Hillary: 26% por Trump y 67% por Clinton, en cualquier caso una diferencia menor entre los latinos católicos que en la media de los latinos.
La significación de la religión en esa comunidad es clara si se compara los resultados de 2016 con los de hace cuatro años. Entonces, el 59% de los católicos blancos votaron al candidato republicano (sólo 1 punto menos que ahora), mientras que entre los católicos hispanos ese 67% de voto a Clinton es ocho puntos inferior al 75% que cosechó Obama.
El desprecio manifestado por el equipo de Hillary Clinton a los católicos y la indisimulada connivencia entre la multinacional del aborto y la candidata demócrata parecen haberle pasado factura.
Voto en las elecciones según la asistencia a algún servicio religioso: al menos una vez a la semana, mensualmente, varias veces al año o nunca.
Y una tendencia parecida se ve, como refleja la gráfica anterior, en cuanto a la práctica religiosa en general, católica o no: 56% Trump y 40% Clinton entre los más practicantes, 62% Clinton y 31% Trump entre los menos.
Comentarios