El cardenal Robert McElroy, muy liberal, nuevo arzobispo para Washington DC, ciudad de poderosos
El cardenal Robert McElroy, de 70 años, que siempre se ha opuesto a negar la comunión a los políticos activamente abortistas, ha sido designado por el Papa Francisco para pastorear la arquidiócesis de Washington DC, es decir, el lugar donde viven más políticos, más ricos y más influyentes.
La diócesis tiene 3,1 millones de habitantes, de los que un 22% son católicos, en unas 140 parroquias. McElroy sustituye al cardenal Wilton Daniel Gregory, de 77 años. Como obispos auxiliares se encontrará allí a dos hispanos muy jóvenes: Juan Rafael Esposito-Garcia (nacido en San Luis, Argentina, de 51 años) y Evelio Menjivar-Ayala (de Chalatenango, El Salvador), de 54 años. También a Roy Edward Campbell, Jr. (obispo auxiliar de 77 años) y al anciano cardenal Donald William Wuerl (84 años), arzobispo previo a Gregory.
McElroy ha sido obispo de San Diego, California, durante casi diez años, una diócesis con 1,4 millones de católicos y cien parroquias.
Formado en Teología Moral, Políticas e Historia
McElroy es doctor en Teología Moral por la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma, y en Ciencias Políticas por la Universidad de Stanford. En Stanford también sacó un título en Historia de EEUU.
Muchos consideran a McElroy abierta o militantemente "progresista" en lo político y lo eclesial. Llega a la capital justo cuando Donald Trump se prepara para asumir un segundo mandato como presidente de Estados Unidos.
Negar la comunión le parece mal
McElroy ha hablado mucho en contra de negar la comunión a poderosos políticos en situación pública y estable de pecado público y de oposición declarada a la enseñanza de la Iglesia.
En varias ocasiones ha dicho que sería "priorizar el aborto" (matar niños inocentes en el seno de su madre, en cifras de decenas o cientos de miles, algo que siempre está mal) frente a otros temas sociales, como la atención a los migrantes y al medio ambiente (donde hay legítimas diferencias y debates sobre las formas técnicas concretas de ayudar a la gente).
Ha declarado que negar la Comunión a políticos en pecado público es usar la Eucaristía "como arma para un fin político". En un ensayo del 5 de mayo de 2021 criticó lo que llamaba "una teología de la indignidad": criticaba el centrarse "demasiado" en la disciplina de quién puede o no comulgar.
McElroy también apoya la idea de las diaconisas en la Iglesia y apoya a los activistas de ideología LGTB en entornos católicos.
Creció en San Francisco (EEUU), fue ordenado sacerdote en 1980 y sirvió como obispo auxiliar del arzobispo de San Francisco, Salvatore Cordileone (mucho más ortodoxo que él) desde 2010. Francisco le entregó la diócesis de San Diego en 2015 y lo creó cardenal en 2022 tras superar una cirugía de bypass en 2021.