En Tombstone, la ciudad de OK Corral, construyó una iglesia que hoy es patrimonio histórico
Nellie Cashman: católica, empresaria y un ángel para los mineros en tiempos del sheriff Wyatt Earp
El tiroteo en OK Corral solo duró treinta segundos -la gran pantalla supo cómo hacer para alargarlo-, pero convirtió al sheriff Wyatt Earp en una leyenda.
Wyatt Earp (1848-1929) tuvo una vida agitada, con trabajos de todo tipo y conflictos con la ley, hasta que en 1874 empezó a dedicarse a hacer que se cumpliese como marshal y sheriff.
Tan leyenda fue, que han querido contarla o encarnarla grandes cineastas y estrellas de todas las épocas del cine: Henry Fonda (Pasión de los fuertes [My darling Clementine], John Ford, 1945), Burt Lancaster (Duelo de titanes [Gunfight at the O.K. Corral], John Sturges, 1957), James Garner (La hora de las pistolas [Hour of the gun], John Sturges, 1967), Kurt Russell (Tombstone, George P. Cosmatos, 1993), Kevin Costner (Wyatt Earp, Lawrence Kasdan, 1994)...
Burt Lancaster (Wyatt Earp), en el centro, flanqueado a su derecha por Kirk Douglas (Doc Hollyday), en la célebre escena del tiroteo en OK Corral de la película de John Sturges en 1957.
Aquel enfrentamiento entre agentes de la ley y unos vaqueros culpables de graves delitos tuvo lugar el 26 de octubre de 1881 en Tombstone (Arizona). Wyatt Earp había llegado dos años antes a la ciudad, y su fama ya era grande cuando una católica irlandesa llamada Nellie Cashman se instaló allí en 1880.
Dura y decidida... pero "una dama"
Ella iba a tener un papel muy destacado en la comunidad, como lo había tenido en cuantos lugares llevaba recorridos, así que sin duda ambos se conocieron personalmente. Nellie fue una mujer notable y decidida: según llegaron a describirla, "linda como un camafeo victoriano, y si hacía falta, dura como un clavo de dos peniques". No era para menos, porque sabía lo que era sufrir y sacar un negocio adelante en ambientes tan rudos como los que se iba a encontrar en aquel lugar.
El encuentro entre Wyatt Earp (Hugh O'Brien) y Nellie Cashman (Randy Stuart), en el tercer episodio de la quinta temporada (1959) de la serie de televisión "Vida y leyenda de Wyatt Earp" (minuto 8:59). La serie invierte cronológicamente el orden de llegada a Tombstone de ambos personajes históricos, y sitúa al protagonista conociendo de incógnito por primera vez un lugar donde ya estaría asentada Nellie Cashman. Ella le pide que le ayude a acabar con las disputas entre mineros y vaqueros.
Nellie Cashman nació en Irlanda en 1845, en una familia católica y pobre. Era la época de la Gran Hambruna o Hambre de la Patata que lanzó a la emigración a miles de irlandeses, en su mayor parte a Estados Unidos.
Fue el camino que siguieron Nellie, su hermana Fanny y su madre cuando su padre murió, teniendo ella cinco años. Se instalaron en Boston y luego en Washington, D.C., donde siendo aún niña consiguió su primer empleo como ascensorista en un hotel. En él coincidió un día con el futuro presidente Ulysses S. Grant, quien la animó a ir al Oeste.
Fuera siguiendo ese consejo o por otras razones, finalizada la guerra civil lo hicieron. En 1865 las tres mujeres llegaron a California. Con el tiempo Fanny se casó, pero Nellie, de espíritu aventurero, prefirió introducirse en el bullicioso mundo de la minería buscando hacer negocios y siguiendo un principio que haría valer más de una vez en el salvaje Far West: "Si te comportas como una dama, los hombres te tratarán como tal".
El ángel de los mineros
Empezó trabajando como cocinera en Nevada, hizo unos ahorros y en 1872 abrió una pensión para mineros. En 1874 se descubrió oro en la Columbia Británica (Canadá), y se desplazó hasta allá con idénticos objetivos. Empezó a ser conocida como "el ángel" de quienes se dejaban la salud en las minas, a quienes atendía cuando estaban enfermos y alojaba gratis si no tenían dinero. Con la fortuna que iba haciendo ayudó a las Hermanas de Santa Ana a construir el Hospital de San José en Victoria, la capital del estado.
Nellie Cashman en un cuadro de Fred Calleri reproducido por Legends of America.
En una ocasión, 26 mineros quedaron atrapados en una tormenta de nieve en las montañas. La situación era tan complicada que ni el ejército se decidía a acudir a su rescate. Nellie costeó, organizó y lideró una expedición de seis hombres con suministros para llevarles auxilio. Tras un recorrido de 1300 kilómetros, los hallaron al cabo de 77 días, y el número de trabajadores no era el previsto, sino el triple. A todos atendieron y curaron hasta que la situación mejoró y pudieron volver.
Monumento a Nellie Cashman en Ring of Cork, cerca de su pueblo natal de Midleton, en Irlanda. La escultura evoca la hazaña del rescate en las Montañas Cassiar, en Canadá. Foto: Ring of Cork.
Su siguiente paso en busca de negocio fueron las minas de plata de Arizona. En 1879 abrió un restaurante en Tucson del que se beneficiaban los pobres a quienes también daba de comer en él. Y al año siguiente, por fin, llegó a Tombstone y puso en marcha el Russ House Restaurant, con gran éxito.
Cuenta la leyenda que una vez alguien se quejó de la comida, que preparaba la propia Nellie. En una mesa cercana se encontraba el pistolero Doc Holliday (Kirk Douglas en la película de 1957), quien se levantó, se acercó al hombre y le dijo que repitiera lo que acababa de decir. "Es lo mejor que he comido nunca", balbuceó el cliente, probablemente recordando OK Corral.
La primera iglesia de Tombstone
En Tombstone había numerosos católicos entre los trabajadores que acudían a la mina, muchos de origen irlandés, pero no tenían un lugar para la misa. Nellie convenció primero a los dueños del Crystal Palace Saloon para que los domingos habilitaran un lugar de culto. Luego empezó a reunir dinero -trabajando como enfermera, además de ocuparse de sus negocios, y haciendo una colecta- para construir la que sería primer templo de la ciudad.
La iglesia del Sagrado Corazón de Jesús todavía existe y en 2002 fue inscrita en el Registro Nacional de Lugares Históricos. Construida con adobe, fue bendecida el 1 de enero de 1881, lo que da idea de la eficacia de Nellie cuando se proponía algo. En 1882 se construyó otra más grande con madera de las montañas trasladada de unos vagones que ella misma alquiló. Fue usada hasta 1946.
Cuando Nellie llevaba pocos meses en la ciudad, la tuberculosis mató al marido de su hermana. Fanny y sus cinco hijos se trasladaron a Tombstone, y dos años después también ella falleció del mismo mal, por lo cual la tía Nellie se hizo cargo de los pequeños hasta su emancipación.
Pero nada la frenaba en su determinación como empresaria y como alma de numerosas obras de caridad, de las que todo el mundo se beneficiaba: hizo campañas de donaciones para el Ejército de Salvación, la Cruz Roja o el Hospital de Mineros.
"Leyendas del Oeste", emisión filatélica de 1994. Vemos a Buffalo Bill, Wyatt Earp, Bill Hickock, Jerónimo... y Nellie Cashman.
La vida en el salvaje Oeste era dura, e imponer la ley exigía severidad. Nellie contribuyó a mejorar las cosas, influyendo sobre unos y otros para apaciguar los enfrentamientos y practicando la caridad.
Ahorcados y conversos
Y así, sus destinos se cruzaron de nuevo con los de Wyatt Earp. El 8 de diciembre de 1883, en Bisbee, seis forajidos mataron en un atraco a cuatro personas, entre ellas una mujer embarazada. Earp participó en la investigación. Había abandonado Tombstone un año antes por otro destino en el estado, pero los asesinos fueron juzgados allí.
Nellie les visitó con frecuencia y fue su guía espiritual, y dos de ellos se convirtieron al catolicismo. Condenados a la horca, la ejecución se iba a convertir en un espectáculo para el que vendían entradas. Nellie convenció al nuevo sheriff de que impidiese tal bochorno, y en parte lo consiguió, limitándose ese día el acceso a la localidad.
Los cuerpos fueron entregados al párroco del Sagrado Corazón de Jesús para su entierro. Se corrió la voz de que iban a ser desenterrados clandestinamente para dedicar sus cuerpos a la investigación médica, así que Nellie pagó una guardia en la tumba durante diez días para evitarlo.
En otra ocasión impidió un linchamiento introduciendo su coche entre los mineros enfurecidos para rescatar a la víctima, a quien pagó su salida de Tombstone.
A un paso del Ártico
Cashman siguió abriendo pensiones y restaurantes en Montana y Nuevo México a la vez que educaba a sus sobrinos. En 1898, siempre siguiendo el rastro de las explotaciones mineras, se asentó en Dawson City (Canadá) cuando la fiebre del oro se desató en torno al río Yukón. Allí reiteró su modelo de emprendimiento profesional y caridad personal.
Con los hijos de su hermana ya independizados, en 1904 puso en marcha una tienda de alimentación en Fairbanks, en el corazón de Alaska. Sirvió y atendió a los mineros a poco más de cien kilómetros del Círculo Polar Ártico, y se dice que con sesenta años recorrió 1200 kilómetros en un trineo de perros.
Tumba de Nellie Cashman en el Cementerio Ross Bay de Victoria: "Amiga de los enfermos y de los hambrientos y de todos los hombres... Un heroico apostolado de servicio entre los mineros de las fronteras oeste y norte... Ángel de los mineros". Foto: Legends of America.
Luego volvió a Canadá, y en 1923 se instaló definitivamente en Victoria. Murió en 1925 a consecuencia de una neumonía, en el Hospital de San José que había contribuido a fundar medio siglo atrás.
Su fallecimiento fue recogido con abundancia en la prensa de la época, que recordó los apodos por los que fue conocida en los diferentes enclaves mineros que recorrió: el Ángel de Tombstone, el Ángel de las Cassiar (las montañas de aquel intrépido rescate), el Ángel de la Mina, el Ángel de la Frontera... Acudiese donde acudiese, un ángel.
Si quiere puede recibir las mejores noticias de ReL directamente en su móvil a través de WhatsApp AQUÍ o de Telegram AQUÍ