El Valle de los Caídos: la Basílica de los Mártires.2

Meta de peregrinación

Cementerios de las diferentes localidades o parajes donde fueron sacrificados los mártires… con alguna sencilla placa conmemorativa o con hermosos monumentos elevados para su memoria. Catedrales, parroquias, iglesias conventuales, monasterios que conservan los cuerpos de los mártires… O incluso, espacios creados de manera exclusiva para mantener viva la devoción de los testigos de la persecución religiosa de los años treinta: como es el caso del Museo de los Mártires Claretianos de Barbastro, en cuya capilla se conservan los cuerpos de los 51 mártires Hijos del Corazón de María...

Son muchos los lugares que se han convertido en verdaderas metas de peregrinación para los fieles cristianos. Uno de ellos es la Basílica de la Abadía benedictina de la Santa Cruz del Valle de los Caídos (Madrid) que, a partir del 25 de marzo, superará en número a la famosa Casa-Museo de los Claretianos de Barbastro.

Cinco más antes de Tarragona
La Guía Memoriae Martyrum (Madrid, 2015) recoge en el capítulo 24 (páginas 139-151) nuevos datos que suman cinco mártires beatificados más de los que aparecían en el primer folleto publicado.

A los siete del pontificado de san Juan Pablo II (dos pasionistas de Daimiel (Ciudad Real), tres salesas de Madrid (bajo estas líneas, altar de la Capilla del Sepulcro donde yacen las tres beatas) y dos marianistas de Ciudad Real) hay que sumar tres más. En total, diez beatos.
 
Estos son sus nombres:

BEATO FLAVIO ARGÜESO GONZÁLEZ, OH
Oriundo de Mazuecos de Valdeginate (Palencia), nace en 1877 e ingresa en la Orden en el mes de noviembre de 1894. Ejerce el apostolado hospitalario en Ciempozuelos, Sevilla, Sant Boi, Carabanchel, Palencia, Santa Águeda, Granada, Valencia, Madrid, Málaga y en Roma y Neptuno de Italia. Está en 1936 en Ciempozuelos y al ser arrestada la comunidad el 7 de agosto, se queda enfermo en el sanatorio. Mejorado en su salud, la noche del 12 es llevado con el pretexto de que tenía que prestar declaración. Y poco después asesinado por ser religioso en la carretera de Andalucía, término de Valdemoro. Tenía 58 años. Fue beatificado por san Juan Pablo II en Roma el 25 de octubre de 1992.
 
BEATO FRANCISCO ARIAS MARTÍN, OH
Nace en Granada el año 1884, se ordena de sacerdote en 1909 y entra en la Orden en el mes de octubre de 1935, después de varios años de apostolado sacerdotal y una fuerte experiencia de persecución en la iglesia de San Nicolás de Granada. En 1936 es novicio en Ciempozuelos y al ser arrestada la comunidad el 7 de agosto se esconde en la huerta del sanatorio. Encontrado, es encarcelado en el pueblo; por su bondad y formación, algún miliciano quiere ocuparle en las oficinas del ayuntamiento, pero otro le acusa de ser sacerdote y de que se haría confesor de las monjas. Ese mismo día, 18 de agosto, lo sacan de la prisión y le dan muerte en el kilómetro 5 de la carretera de Valdemoro a Torrejón. Tenía 52 años. Fue beatificado por san Juan Pablo II en Roma el 25 de octubre de 1992.

Yacen en los columbarios 4612 y 4613 del Valle de los Caídos.
(Ver: https://martireshospitalarios.wordpress.com/)
 
BEATO TIMOTEO VALERO PÉREZ
Nace en Villarejo de Terriente (Teruel), en 1901. Presbítero de los Terciarios Capuchinos de Nuestra Señora de los Dolores (amigonianos). Ejerce su ministerio en la Escuela de Reforma Santa Rita de Carabanchel, donde lo encuentra la persecución. Se refugió en casa de su hermano, donde fue detenido y encarcelado en la checa de Fomento, y asesinado el 17 de septiembre de 1936. De carácter juvenil, alegre, jovial, bromista, de trato fácil para con los jóvenes y excelente músico. Fue beatificado por san Juan Pablo II el 11 de marzo de 2001.
 
En el pontificado de Benedicto XVI

Al beato José Gafo, dominico, y las siete adoratrices, hay que sumar dos padres agustinos de Uclés que. tras la celebración del 28 de octubre de 2007, elevaban a 20 la cifra de beatos enterrados en el Valle de los Caídos.

Según el registro 381, el beato Jacinto Martínez Ayuela, OSA, (bajo estas líneas), yace en el columbario 209 (cripta derecha, primer piso).
 
El beato Nicolás de Mier Francisco, OSA, según el registro 373, en el columbario 201, en el mismo lugar.

Ambos pertenecían a la comunidad de Uclés (Cuenca) y fueron martirizados, junto a las tapias del cementerio de la ciudad de Cuenca, el 21 de septiembre de 1936.