La eutanasia es matar enfermos. El suicidio asistido es ayudar a que alguien se suicide. Ambas cosas repugnan a la ética médica y al juramento de Hipócrates ("nunca, ni siquiera ante un ruego, administraré algún veneno letal como tampoco daré consejo para eso", dice la máxima del gran médico griego).

La Asociación Médica Mundial establece que “la eutanasia, que es el acto de terminar deliberadamente la vida de un paciente, incluso a petición del paciente o a petición de parientes cercanos, no es ética”. Y añade: “El suicidio asistido por un médico, como la eutanasia, no es ético y debe ser condenado por la profesión médica. Cuando la asistencia del médico se dirige deliberadamente a permitir que un individuo termine su propia vida, el médico actúa sin ética”.

Todo esto no importa a los partidarios de la eutanasia. Ciudadanos y el PSOE prometen en plena campaña electoral que van a implantarla en España.

(Lea aquí: 20 argumentos contra legalizar la eutanasia)

Un caso extremo emotivista y en campaña electoral

Un caso extremo sirve de excusa emotivista y para agitar la campaña electoral. Ángel Hernández dio un bebedizo con veneno a su esposa María José Carrasco, a la que venía cuidando como dependiente hace 10 años. Habían pedido plaza en un centro, pero sólo habían recibido sedantes. Él sale en la prensa pidiendo que se apruebe la eutanasia, no pidiendo mejores ayudas. Ha difundido su vídeo en el que ella da su consentimiento a que la mate su marido. ¡Es la sociedad de la imagen: hoy todos podemos ver como un marido mata a su esposa!

El secretario general de Ciudadanos, José Manuel Villegas, aseguraba este viernes 5 de abril que si su partido preside España tendrá como una prioridad, dentro de sus primeros cien días, regular la eutanasia "con garantías". En Onda Cero, el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, prometía "una ley de la eutanasia garantista y con consenso", con "otros partidos". Los expertos suelen responder que no existen las garantías: creado el sistema, por él se deslizan las víctimas, cada vez más y por más causas, siempre abaratando costes. Al final, si es "por petición, por libertad", no hay límite posible.

Por su parte, el presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha prometido que si obtiene "una mayoría parlamentaria" tras las elecciones generales del próximo 28 de abril el derecho a morir dignamente (es decir, la eutanasia, matar enfermos) "será reconocido". Acusa a los partidos liderados por Pablo Casado y Albert Rivera por haber obstruido "hasta en 19 ocasiones" la "tramitación y la votación en un pleno que quería votar" a favor de la despenalización de la eutanasia.

Pedro Sánchez y el PSOE promueven la eutanasia como algo "de 
izquierdas", pero en Portugal los comunistas la bloquearon porque
promocionaba el matar enfermos sin promocionar los cuidados paliativos

En Portugal, los comunistas bloquearon la eutanasia: ellos pedían paliativos

Se da la circunstancia de que hace apenas 1 año, los 15 diputados comunistas del Parlamento de Portugal, votaron contra la propuesta de Ley de Eutanasia de las otras izquierdas. Sumados a las derechas, bloquearon la ley eutanásica. Veían claro que se trataba de facilitar el matar enfermos sin aportar cuidados paliativos. Su portavoz António Filipe lo explicó así: "el Estado, que no pone medios para garantizar los cuidados paliativos del enfermo terminal, sí que los pondría para acabar con su vida". El Bloco de Esquerda, molesto, respondió a los comunistas portugueses que los comunistas españoles sí votan a favor de la eutanasia.

En Portugal el debate sobre los cuidados paliativos, la alternativa ética al sufrimiento en el proceso de la muerte, se debatió mucho. Un documento firmado por representantes de 8 religiones recordaban que los cuidados paliativos, que son la respuesta ética correcta ante el dolor y la cercanía de la muerte, sólo llegan a un 10% de los enfermos que los necesitan. En España la situación es mejor: los cuidados paliativos llegan al 50% de los enfermos que los necesitan. Aún queda mucho por hacer.

"La muerte provocada no es la solución a los conflictos"

El secretario general de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Luis Argüello, ha afirmado este viernes que "la muerte provocada no es la solución a los conflictos" de la sociedad. "No pienso, Dios me libre, en la cárcel para nadie, pero sí en la necesidad, desde la radical defensa de la vida" de apoyar cualquier decisión que evite "que la muerte sea la solución de los problemas".

En el caso de Ángel Hernández se le juzgaría por el artículo 143 del Código Penal, aprobado en 1995, regula la inducción y la cooperación al suicidio: "El que causare o cooperare activamente con actos necesarios y directos a la muerte de otro, por la petición expresa, seria e inequívoca de este, en el caso de que la víctima sufriera una enfermedad grave que conduciría necesariamente a su muerte, o que produjera graves padecimientos permanentes y difíciles de soportar, será castigado con la pena inferior en uno o dos grados a las señaladas en los números 2 y 3 de este artículo". Podrían ser entre 6 meses y dos años de pena, y cuando la pena es tan pequeña, en España es casi seguro que no se entra en prisión. 

¿Las cárceles llenas de eutanasiadores? Sólo un condenado... y no entró

En La Sexta aseguran que en las últimas décadas, en España, sólo ha habido un médico castigado penalmente por haber matado a un enfermo con eutanasia: se trata del argentino Marcos Hourmann, que en 2005 inyectó cloruro potásico a una paciente terminal de 82 años, que se lo pidió. Se declaró culpable, evitó la prisión, pero emigró a Inglaterra y allí salió su cara en la prensa: "Killer doc worked in UK hospitals". ¿Quién quiere tener un médico que mata enfermos en su hospital? "Perdí todo, pasamos miseria, no sólo la económica, también la moral. A pesar que uno intenta salir con la vida... tenía un hijo de un año y medio", lamenta ahora.

Marcos Hourmann mató una paciente en España, intentó trabajar luego en Inglaterra pero la prensa publicó sobre el "Killer Doc" y los hospitales no querían contratarle; al parecer, es el único médico condenado por eutanasia en las últimas décadas

Sigue siendo activista pro-eutanasia. El argentino quiere contar su historia desde su punto de vista y tiene una obra de teatro militante para ello.

"En España, aunque la eutanasia está prohibida, el Código Penal tiene en cuenta la compasión e introduce una atenuante muy privilegiada", explica Federico de Montalvo, jurista y presidente del Comité Español de Bioética.

O dicho de otra forma: la ley actual no llena las cárceles de médicos y cómplices, pero sí dificulta que se genere la cultura que mata enfermos con facilidad que se ve en Holanda (donde matan por "previsión de dolor en el futuro") y Bélgica, donde, en 9 años, se ha pasado de 900 eutanasias anuales a 2.300: ¡la oferta genera su demanda!

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Vea el trailer de 1 minuto "El engaño de la eutanasia"

El doctor Jacinto Bátiz cree que en vez de eutanasias, los políticos han de hacer leyes que implanten los cuidados paliativos, que son éticos, por toda España

El jurista José Javier Castiella explicaba hace unos meses como algunas normas de "voluntad anticipada" pueden abrir camino a la eutanasia, y como los supuestos "controles estrictos" enseguida se desmoronan