Una nueva victoria provida se ha dado en Estados Unidos donde el aborto poco a poco va siendo arrinconado y empieza a perder terreno.  Así ha quedado de manifiesto con la última decisión de la Corte Suprema, la más alta instancia judicial del país, que acaba de confirmar la ley del Estado de Kentucky que exige que los médicos muestren a las madres que han solicitado un aborto una ecografía de su bebé y que escuchen el latido de su corazón.

Uno de los principales objetivos de los defensores del aborto es deshumanizar el feto, y esta iniciativa del latido que se está aprobando en varios estados va en la dirección contraria: quiere mostrar claramente que ese bebé es una persona única e irrepetible. Para Fiorella Nash, consultora de Bioética, considera que “si las mujeres tienen la oportunidad de ver y escuchar a su bebé podrán rechazar el aborto”.

Esta ley de Kentucky que obliga a mostrar ecografías y escuchar el latido del corazón del bebé se aprobó en 2017, pero el grupo proabortista American Civil Liberties Union, presentó una apelación ante la Corte Suprema en nombre de la único centro abortista del Estado.

Liberarse de décadas de adoctrinamiento y propaganda

Sin embargo, el tribunal ha rechazado esta apelación y permite que la ley actual se mantenga vigente. “Para que las mujeres sean verdaderamente libres debemos ser intelectualmente libres, y eso significa desafiar y liberarse de décadas de adoctrinamiento y propaganda. Si los promotores del aborto consideran que las mujeres son demasiado infantiles para que se les ofrezca la verdad sin censura, es difícil ver sobre qué base pueden hablar de darles a las mujeres una opción informada, y una opción que no está informada no es una opción en absoluto”.

De este modo, esta ley del latido de Kentucky ha inspirado a otros estados de EEUU e incluso a otros países, de ahí que acabar con la raíz de esta normativa haya sido un objetivo de lobby abortista.

Un ejemplo de este efecto dominó ha sido Eslovaquia, que está ya debatiendo una propuesta legislativa similar a la de Kentucky con el objetivo de “garantizar que las mujeres estén informadas sobre la etapa actual de su embarazo antes de abortar”.

La ciencia, del lado provida

Fiorella Nash afirmó a Life News que “la negación absoluta de la humanidad del feto continúa a pesar del uso rutinario del ultrasonido, incluidas imágenes claras de 4D y un  creciente cuerpo de evidencia que demuestra la capacidad del feto para detectar y responder al tacto, sonido, luz y dolor”.

La negación siempre ha sido un mecanismo de defensa necesario para los defensores del aborto, pero en lugar de tener el coraje de enfrentarse de frente a la realidad científica, muchos partidarios se esconden detrás de un lenguaje cada vez más elaborado y engañoso para ocultar la verdad de lo que implica el aborto”.