Miguel Bosé, Ricky Martin, Cristiano Ronaldo... hombres ricos y famosos de repente aparecen en la prensa con uno o más bebés y dicen que son sus hijos. ¿Y la madre de los niños? No existe, no se menciona, no aparece.
A menudo se trata de ricos que han recurrido a una gestante de alquiler, a la que han pagado para que les entregue el bebé que ha llevado en su seno durante 9 meses. Lo han hecho en países que permiten esta compra de bebés (como Estados Unidos), aunque se camufle a veces como donación "altruista" o que se paga por "las molestias y mantenimiento".
¿Dónde está la madre o las madres de estos bebés, la mujer que los gestó y parió? ¿Por qué se ha separado a un bebé de su madre, de su olor, el ritmo de su latido, el sonido de su voz?
La realidad es que un bebé es separado de la mujer que lo gestó y alumbró y, en muchos casos, de todo su linaje genético. Si tiene mal genio, alergias o propensión a la melancolía nunca sabrá que su abuela o bisabuela también tenían esas tendencias, ni sabrá como las superaban o gestionaban.
Los ricos y famosos aparecen en las revistas como si el bebé hubiera llegado por Amazon, sin una historia, sin un pasado, sin un linaje. Y como si ser separado de su madre gestante no tuviera efecto.
Pero la realidad es que la ciencia entiende cada vez mejor la importancia de los lazos que se establecen entre el bebé y su madre gestante.
Sobre ellos escribe Ibone Olza (iboneolza.wordpress.com), doctora en medicina y especialista en psiquiatría infantil y perinatal, cofundadora en 2003 de la Asociación El Parto es Nuestro (www.elpartoesnuestro.es) y directora del Instituto Europeo de Salud Mental Perinatal (saludmentalperinatal.es). Su análisis directo y detallado ha sido difundido por la red internacional Stop Surrogacy (www.stopsurrogacynow.com) que pide la ilegalización de toda práctica de vientres de alquiler por sus daños a las mujeres y a los niños.
Ibone Olza es especialista en psicología perinatal
Si quieres ser padre o madre por gestación subrogada
necesitas esta información
por la Dra. Ibone Olza
Si quieres o consideras ser padre o madre por gestación subrogada, necesitas conocer esta información sobre algunos aspectos que reiteradamente omiten las agencias que promueven la subrogación y que tiene que ver con la salud del bebé, tu posible hijo-a.
Permíteme explicarte brevemente algunos puntos importantes. Me baso en la evidencia científica.
1. Lo que vivimos en el útero de nuestra madre afecta profundamente a nuestra salud física y psíquica.
Si durante el embarazo la madre sufre mucho estrés, está deprimida, consume tabaco, alcohol u otras sustancias tóxicas, el desarrollo del bebé se verá afectado de diferentes maneras. Igualmente si la madre no desarrolla un vínculo con el bebé desde la gestación, se cuidará peor, y el bebé padecerá las consecuencias de esa falta de vínculo y amor.
Los que defienden la gestación subrogada dicen que las gestantes no se vinculan con los bebés durante el embarazo, lo afirman como si fuera algo bueno, cuando en realidad eso es un drama para el bebé en el útero. Si la madre no se vincula, si no siente al bebé como su hijo, el bebé lo percibirá y se sentirá poco o nada querido durante el embarazo: esto afectará a su desarrollo y puede marcar el desarrollo de su personalidad.
Los obstetras y matronas que atienden a las embarazadas se preocupan mucho cuando una embarazada no se siente conectada con su bebé: saben que eso es una señal de alerta de posibles problemas serios y complicaciones del embarazo.
2. La psicología prenatal lleva más de cien años investigando la huella que deja la vida uterina en todo ser humano.
Hay muchos testimonios e investigaciones al respecto: los bebés que no se sintieron queridos durante el embarazo a menudo han arrastrado las consecuencias de esa falta hasta la edad adulta. Otto Rank, Nandor Fodor, Francis Mott, Donald Winnicott, Stanislav Groff, Lloyd de Mause, Alesandra Piontelli, David Chamberlain y muchos más lo han investigado a fondo. El psiquiatra Thomas Verny afirma que el período prenatal es el más importante de toda nuestra vida.
Los que afirman que a tu futuro hijo o hija no le va a marcar lo que viva en el útero, te están mintiendo.
3. Afortunadamente, la probabilidad de que la gestante no se vincule con el bebé es muy baja.
El embarazo conlleva una transformación biológica muy potente y en cierto sentido irreversible. Incluso si el óvulo no es de la mujer que gesta al bebé, la embarazada puede interferir en la expresión genética del bebé, haciendo que se expresen unos genes u otros por mecanismos de epigenética. Es decir, no es cierto que si el óvulo no es de la gestante no va a haber conexión genética entre la mujer embarazada y su bebé. (Por cierto, el embarazo con ovodonación conlleva un mayor riesgo de algunas complicaciones obstétricas como la preeclampsia, que puede ser muy grave).
4. Desde hace unas cuantas décadas también sabemos que el nacimiento es muy importante para nuestra salud.
Nacer por cesárea programada, por parto inducido o prematuramente, aumenta el riesgo de tener complicaciones importantes a largo plazo, como obesidad, asma, TDAH, trastornos del aprendizaje, etc…Aunque en la subrogación es práctica habitual programar el parto para que los futuros padres y madres puedan estar presentes cuando se produce el nacimiento, lo cierto es que inducir o programar un parto o cesárea tiene muchos riesgos, tanto para la madre como para el bebé que va a nacer.
5. El bebé no sabe de donde vienen el óvulo o el espermatozoide que le han dado la vida, pero sí sabe quien es su madre: la que lo ha gestado.
El bebé no conoce otra madre y cuando nace sólo espera encontrse con ella. Todos los recién nacidos llegan al mundo esperando ese encuentro y estar con su madre o cerca de ella la mayor parte del tiempo los primeros meses de vida.
6. Para todos los recién nacidos es altamente estresante ser separados de su madre nada más nacer.
Por eso todas las recomendaciones actuales tanto de la OMS como de Unicef o las asociaciones médicas van en la línea de promover el parto natural o respetado y sobre todo de no separar al recién nacido de su madre. Ese estrés de la separación es mayor cuanto más se prolongue la separación y además es neurotóxico, es decir, cuando al bebé le separan de su madre sufre, llora, y libera altas dosis de cortisol que pueden a su vez dañar su sistema nervioso.
7. Es abrumadora la evidencia científica que demuestra los beneficios de la lactancia materna, especialmente los seis primeros meses de vida. La lactancia artificial desde el inicio de la vida multiplica el riesgo de padecer alergias, asma, diabetes tipo I, infecciones varias e incluso algunos tipos de cánceres infantiles.
Por todo ello, aunque las agencias que promocionan la subrogación lo nieguen y oculten, es importante que sepas que el recién nacido por gestación subrogada está expuesto a toda una serie de factores que pueden condicionar seriamente su salud física y mental a corto y largo plazo. Por el estrés que supone el embarazo para la madre, por la posible exposición a tóxicos, por la falta de vínculo prenatal, por el parto programado o inducido casi siempre antes de tiempo y sin causa médica, por el estrés de la separación de la madre, por su ausencia, y por la falta de lactancia materna. No va a ser sencillo criar a ese bebé, aunque algunas de las consecuencias de todo lo sucedido en el embarazo y parto pueden aparecer años más tarde.
8. ¿Bebé sin madre? Es como una muerte psíquica...
El bebé gestado por subrogación no conoce otra madre que la mujer que le ha gestado. Incluso si el óvulo proviene de una ovodonación, él o ella no sabe eso. Ser separado de su madre nada más nacer, y casi no volver a verla, equivale a que su madre muera en el parto. Es decir, son bebés que nada más nacer tienen que afrontar la muerte psíquica de su madre, por así decirlo.
Imagina por un instante lo que tiene que ser perder a la madre en el parto, así podrás hacerte una idea de la suma de pérdidas que conlleva la gestación subrogada. Incluso si otros madres o padres que lo han sido por esta vía te dicen que sus hij@s están perfectamente, eso no asegura que no vayan a tener serios problemas de salud en etapas más tardías de la vida como consecuencia de lo vivido en la etapa pre y perinatal.
Hay muchos otros argumentos para posicionarse en contra de la subrogación, pero en este caso me he centrado en lo que más suele preocupar a todos los futuros padres y madres: tener un bebé sano.
Por eso, si estás considerando ser madre o padre por gestación subrogada sólo puedo decirte que te informes bien y pedirte que no lo hagas. Hay otras maneras de ser madre o padre, y sobre todo, de cuidar.
Copia original: https://iboneolza.wordpress.
Vídeos como este, Breeders, de la enfermera pediatra y activista Jennifer Lahl, muestran que el vientre de alquiler -incluso el llamado altruista- daña también a las mujeres