En la lectura del manifiesto del acto, los convocantes afirmaron que pese a la difícil situación que se vive en España con respecto a la defensa del no nacido, “las asociaciones provida han sido capaces de mantener viva la llama” en esta lucha.
“Estamos aquí para proclamar alto y fuerte la grandeza de cada vida humana y las increíbles posibilidades que cada uno de nosotros tenemos. Todos somos necesarios”, aseguraban.
De este modo, el manifiesto hacía varias reivindicaciones: “Queremos que cada persona, desde su concepción hasta la muerte natural, sea defendida, protegida y valorada en el campo científico, legislativo y social. De esta manera todas las decisiones que se tomen desde cualquier ámbito, deben impedir su eliminación, instrumentalización o ser tratadas sin el respeto y valor que tienen por su dignidad de seres humanos”.
Por ello, el texto que leyeron los organizadores de la concentración de este domingo agregaba que “del pasado no podemos cambiar ni una coma, pero tenemos el instante presente y en él acogemos la vida y lo haremos a cada reto que se nos presente”.
Durante el acto que se convirtió en una jornada festiva hubo distintas actuaciones musicales que se fueron intercalando con algunos testimonios y es que en esta edición los jóvenes tuvieron una especial importancia.
De este modo, Nacho salió al escenario para explicar la labor de los Rescatadores Juan Pablo II, formada por cientos de jóvenes que acuden a las puertas de los abortorios para rescatar a mujeres que acuden a abortar. En cinco años han salvado ya a más de 2.000 bebés.
Este voluntario explicó emocionado la sensación de poder rescatar a estos bebés condenados a morir y cómo las madres “están deseando agarrarse a un clavo ardiendo” para no tener que abortar.
“Aprendes a mirar a los ojos y a ver qué ha llevado a esta mujer a querer abortar. Hay muchas veces que sólo quieren hablar y tener quien las escuche. Solo necesitan que alguien les diga que su hijo vale la pena”, afirmaba.
Y llamaba la atención afirmando que estos jóvenes “demostramos que la lucha por la vida sigue y que no es cosa de viejos. Los jóvenes seremos los que saquemos la defensa de la vida adelante y quienes consigamos ese cambio”. Posteriormente, ofreció su testimonio una de estas mujeres rescatadas y cómo estos jóvenes cambiaron su vida para siempre.
También hubo varios testimonios internacionales, entre los que destacó el de la nigeriana Uyu Ekeocha, defensora de la vida en su país y que lucha contra las presiones internacionales para expandir el aborto por todo el continente.
“Lo hacen porque ganarán dinero si ponen clínicas abortivas en África”, afirmaba, destacando que existen otros problemas muchos más graves y reales como “la educación, el acceso al agua y a la comida…No queremos la legalización del aborto y ni siquiera lo estamos pidiendo”.
El acto acabó con la suelta de cientos de globos con distintos mensajes provida haciendo patente la importancia de esta causa para el futuro de la sociedad.