El encuentro tendrá lugar en la ciudad de Londrina, en Brasil, entre los días 15 y 17 de julio. "Juntos queremos, a partir del carisma del Fundador insertado en la Iglesia, contemplar la belleza de la vocación matrimonial", afirman los superiores del Instituto de Familias en Brasil, José Roberto y Bernadete Nassif.
Para el evento, son esperados representantes de toda la Obra de las Familias de Schoenstatt - formada por la Liga Apostólica, Unión Apostólica e Instituto de Familias- de varios países. Hoy, en Brasil, aproximadamente 2 mil familias integran las comunidades de Schoenstatt.
La pareja Luis y Pilar Jensen, de Chile, que asistieron al Sínodo de las Familias a invitación del Papa Francisco, impartirán una conferencia en el congreso, así como la Hermana M. Fernanda Balan, que trabajó durante varios años en Pastoral Familiar junto a la Conferencia Nacional de Obispos del Brasil (CNBB).
Además de ellos, el Padre Ivan Simicic, asistente nacional del Instituto de Familias de Schoenstatt, el Padre Marcel Mouras, asistente internacional, y la pareja conferencista Pepo y Patricia Kostner, de Argentina, miembros de la dirección general del Instituto, también estarán presentes.
El congreso promoverá además un estudio más profundizado sobre la vida de Helene y Friedrich Kühr, la primera pareja en ingresar al Instituto de Familias, siendo que él es el co-fundador, junto al Padre José Kentenich, de la Obra Familiar de Schoenstatt.
Diplomático alemán, el Dr. Kühr fue prisionero en el campo de concentración de Dachau, en el cual conoció al Padre Kentenich. Allá, él captó profundamente los ideales y aspiraciones de Schoenstatt y así, el 16 de julio de 1942, hizo su consagración, tornándose el primer novicio del Instituto.
A su vez, Helene, mientras viajaba al Brasil para conocer las tierras que habían comprado en Rolândia, Paraná, se vio en medio del contexto de guerra. En la época, ella no pudo volver para Alemania y de esta forma, estuvo separada del marido por diez años, ya que él estaba preso.
En 1947, Dr. Kühr consiguió viajar al Brasil para encontrarla. Y desde entonces, ellos permanecieron juntos, viviendo en Rolândia, hasta 1950, cuando él falleció.
Según Diógenes y Paulina Lawand, del Instituto de Familias, "el objetivo es realizar un Congreso para la Obra Familiar, vinculando la vida matrimonial con el amor conyugal de la familia Kühr. Ellos son un ejemplo para el tiempo de hoy; estuvieron diez años separados físicamente, estuvieron en una guerra, tuvieron todas las privaciones y, aun así, mantuvieron el amor entre ellos, se mantuvieron unidos".
Los participantes de ese congreso tendrán la oportunidad de acompañar el traslado de los restos mortales de la Sra. Helene Kühr junto al marido, quedando los dos en una urna, al lado del Santuario de Schoenstatt, en Londrina.
Fallecidos en lugares distantes, Helene y Friedrich fueron sepultados en lugares distintos.
La intención es que ambos permanezcan juntos, incluso después de la muerte, inspirando a nuevas familias a partir de su ejemplo. "Nosotros pensamos: los dos vivieron la vida con un amor conyugal tan grande, ellos no pueden estar separados. Esta es la hora de unir la pareja", contó la pareja Lawand.