Con motivo de la festividad de la Natividad de la Virgen María celebrada este jueves, varias regiones y ciudades han celebrado a sus patronas, con actos eclesiales a los que han acudido autoridades civiles.
En ese contexto, varios obispos españoles han denunciado la "legitimación de la muerte" con la nueva ley del aborto, y han criticado también la eutanasia, aprobada hace más de un año en España.
En Córdoba: "Abortar y poder matar es cada vez más fácil"
Uno de ellos fue el obispo Demetrio Fernández, que presidió la Misa en honor a la patrona de la ciudad de Córdoba, Nuestra Señora de la Fuensanta.
Durante la homilía cuestionó que sea posible "hablar de progreso en nuestra sociedad" cuando "los derechos humanos son cada vez más conculcados" y, especialmente, en la que "abortar y poder matar a quien tiene una vida no muy saludable es cada vez más fácil".
En Canarias: una "hipocresía" por la que "veremos a alguna niña morir"
Por su parte, el obispo de la diócesis de Canarias y presidente de la Subcomisión Episcopal para la Familia y Defensa de la Vida, José Mazuelos -licenciado en Medicina y médico entre 1983 y 1985- presidió la Misa ante la Virgen del Pino este 8 de setiembre.
En la predicación se refirió a la "hipocresía" que inunda la nueva ley del aborto al ser necesario "pedir una autorización para ir de excursión en los colegios y no para abortar". Asimismo, calificó como una "falsedad" el hecho de "pedir receta médica para comprar antibióticos" mientras que se dispensan "choques hormonales a niñas sin control", en referencia a la obligatoriedad de dispensación -incluso gratuita- de la píldora abortiva del día después.
Algo que a su juicio fomenta "la irresponsabilidad" así como otras "consecuencias psicológicas y biológicas" que pueden originar.
Entre ellas, vaticinó que "veremos alguna niña morir por la noche en su casa con una complicación del aborto por unas hemorragias, porque no se atreverá a decirle a su padre que ha ido sin su consentimiento a abortar".
Por ello, se dirigió a los políticos y autoridades presentes instando a abandonar "ideologías de despachos" y, en su lugar, "buscar el bien común".
Asimismo, Mazuelos defendió que "la maternidad debe ser parte esencial de todo programa de promoción de la mujer", que en el trabajo "no se le deben poner trabas, sino favorecerla" y demando que la sociedad y el Estado "ayude económicamente a aquellas mujeres que quieran dedicarse sólo a ejercer su maternidad".
"La maternidad es un don y una responsabilidad. Es un don y no una desgracia como quiere hacernos ver la cultura de la muerte donde ya no se escucha bendito el fruto de tu seno, sino rechaza el fruto de tu seno: aborta", concluyó.
Lee aquí todas las reacciones católicas y provida a la nueva ley del aborto.
En Covadonga: "La vida es digna, hasta el final"
El arzobispo Jesús Sanz Montes pronunció otro firme alegato a favor de la vida ante la Santina, la Virgen de Covadonga, durante el día de Asturias.
En la homilía de la misa, Sanz se dirigió a la multitud de autoridades presentes -entre ellas, el Presidente del Principado de Asturias, el Alcalde de Cangas de Onís o los Presidentes del Tribunal Superior de Justicia y de la Audiencia Provincial- y recordó "el deseo de que aquellos que tienen en su mano la gestión de la cosa pública, lo hagan de verdad pensando en el bien común de las personas y en el bienestar de los pueblos".
Un deseo que se incumple cuando, "con dolor, uno ve que se aprueban leyes que matan abaratando el aborto de los no nacidos y desprotegiendo a las mujeres más jóvenes". En el mismo sentido se refirió a "la eutanasia" como "un derecho al suicidio desesperado o al homicidio encubierto con los enfermos o ancianos en fase terminal", en lugar de "acompañar con cuidados paliativos una vida que es digna hasta el final".
Homilía del Día de Asturias de 2022: Sanz habla de temas éticos y sociales a partir del minuto 1h05m.
En Lugo: "El Estado no puede determinar qué es el bien y el mal"
Durante la última semana también se ha pronunciado el obispo de Lugo, Alfonso Carrasco, que a través de su cuenta de Twitter subrayó que "la aprobación de una ley no cambia la naturaleza de las cosas".
"No está en el poder del Estado determinar qué es el bien y el mal. Que el aborto es intrínsecamente malo puede reconocerlo cualquier persona con uso de razón y deseo de verdad", añadió.
Acto seguido publicó un nuevo mensaje denunciando la "negación de los derechos" y de "la libertad de conciencia de médicos, enfermeras, psicólogos" y el resto de involucrados en el proceso del aborto por la reforma legal del aborto.
Arzobispo Argüello: aniquilar al más débil, y en invierno demográfico
Luis Argüello, arzobispo de Valladolid y portavoz de la Conferencia Episcopal Española, también reaccionó recientemente ante la ley del aborto desde los micrófonos de cadena Cope, así como desde su cuenta de Twitter el 18 de agosto.
“En una situación de invierno demográfico, en la que los avances de la ciencia permiten decir de manera indubitable que en el seno de una mujer hay una nueva vida, el plantear el aborto como un derecho y el tratar de resolver el conflicto, que reconozco que pueda producirse en determinadas situaciones, pensar que la solución de ese conflicto sea aniquilar, al que además es el más débil, francamente, es algo tremendo”, dijo en Cope.
Por "invierno demográfico" el arzobispo de refiere a la desastrosa natalidad en España: en lo que llevamos de año, casi todas las provincias españolas tienen más muertes que nacimientos (excepto Madrid, Almería y las dos ciudades de África) y hace ya varios años que España en general tiene más entierros que partos.
Argüello ha añadido: “No se puede considerar progresista la imposición de la voluntad de poder y del derecho de decidir de una persona sobre alguien tan frágil y vulnerable que es una persona que ya está en el seno de una mujer embarazada”.