La cultura del aborto se basa en hacer invisible al niño y decidir sin tenerlo en cuenta. Por eso es impactante el vídeo de apenas 2 minutos que la asociación provida StandTrue.com presentó en la pasada marcha por la vida de Washington en enero de 2015: una niña está jugando, y escucha a sus padres discutir… y plantearse el aborto.

La idea y la realización del vídeo, titulado, "If I can´t see it" ("Si no puedo verlo") corrió a cargo de jóvenes de la parroquia de St Mark en la ciudad de Charlotte, a través de una pequeña productora “por y para jóvenes”, Angelic Films.

Una de las impulsoras de la iniciativa es una joven que abortó y se arrepintió, Zoe Griffin, que ha hablado después a favor de la vida en numerosas ocasiones y en la Marcha por la Vida.

StandTrue.com busca llegar especialmente a los jóvenes y animarlos a que sean “una voz por la vida en esta cultura de la muerte” y la asociación decidió apoyar la producción del vídeo de los jóvenes. “Me conmovió y me inspiró”, asegura el presidente de Stand True, Bryan Kemper. “No es desagradable, aunque es directo y honesto, y tiene una gran belleza”.

El guión lo escribió Emily Pressley, estudiante de cine de 19 años en la Western Carolina University. El director fue el joven Henry Hoyt, que lo presentó en las jornadas provida de Washington del pasado enero. Detrás de las cámaras, su madre Betsy Hoyt, con más de 15 años de experiencia en el mundo de la comunicación, cine y publicidad y es profesora de producción de cortometrajes. Todos son parroquianos de St Mark.

La familia Hoyt asegura que su pequeña productora Angelic Films “fue creada por jóvenes y para jóvenes después de ver que es necesario que ellos lleven a la plenitud la misión que Dios les encomienda de difundir el Evangelio de la Vida”, aseguran.