En 2013, el aborto acabó con la vida de 108.690 niños, según los datos oficiales publicados este martes. Abortaron 11,74 mujeres por cada mil en edad fértil, un descenso del 5,63% respecto a 2011. Sin embargo, permanece estable el número de embarazos que acaban en aborto, el 20,35%. Un primer análisis de los datos parece indicar la incidencia de la crisis en la decisión de abortar, y la consolidación de una mentalidad abortista en la sociedad.

En 2013, en España se produjeron 108.690 abortos. Así lo demuestran los datos del aborto hechos públicos por el Ministerio de Sanidad este martes, casi un año después. Puede parecer un descenso significativo, sobre todo si se compara con el pico de 118.359 abortos de 2011.

En realidad, aunque sí hay un descenso, hay que tener en cuenta que el número de mujeres en edad fértil (de 15 a 44 años) también se ha reducido. Por cada mil mujeres, en 2013 abortaron 11,74, un 2,25% menos que en 2012 y un 5,63% menos que en 2011, cuando en términos absolutos el descenso es del 3,29% y del 8,17% respectivamente.

Además, la tasa de abortos de 2013 sigue siendo un 31,32% mayor que en 2004. Curiosamente, una panorámica de los datos muestra que la mayor consolidación del aborto en España se produjo incluso antes de la entrada en vigor de la ley Aído-Rajoy y del comienzo de la crisis, entre los años 2005 y 2007. Se pasó de una tasa de 9,60 a 11,49 abortos por cada mil mujeres en edad fértil.

Sin embargo, hay un dato que apunta a que la situación no está cambiando tanto como parece: el número de abortos en relación con el de embarazos ha aumentado ligeramente respecto a 2012. Si hace dos años los abortos fueron el 19,86% de los embarazos de ese año (566.027), el año pasado fueron el 20,35% (de 534.080 embarazos).

Continúa el aumento de los abortos en centros públicos. Siguen siendo sólo un 8,96%, cuando en 2009, antes de que entrara en vigor la ley Aído-Rajoy, eran el 2,03%, y en 2012, el 6,48%. Por comunidades autónomas, las cinco donde se producen más abortos son Madrid (14,62 abortos por mujer), Cataluña (14,18), Asturias (13,62), Baleares (13,06) y Canarias (13,03). En el otro extremo de la tabla destacan Ceuta y Melilla (3,74), La Rioja y Galicia (6,78), Extremadura (7,12) y Castilla y León (7,11).


Un dato que resulta llamativo es que en las mujeres de 30 años en adelante, la tasa de abortos sigue aumentando: entre 30 y 34 años es de 13,42, un 56,6% más que en 2004; entre 35 y 39 años, 9,22 (un 50,7% más que en 2004); y de 40 años en adelante, 3,92 (un incremento del 45,7%).

El perfil mayoritario de mujeres que abortan viven en pareja y tienen hijos (el 29,02%), seguidas de las que no tienen hijos y viven con sus padres u otros familiares (17,66%). De hecho, más de la mitad de las mujeres que abortan (el 54,92%) tiene hijos, un 48,28% vive en pareja y un 24,48% vive con sus padres u otros familiares.

Estos dos datos, la consolidación del aborto entre las mujeres adultas y el hecho de que muchas tengan hijos y tengan pareja e hijos apunta a dos posibilidades, no excluyentes. La primera de ellas es que la crisis, junto a la falta de ayudas a la maternidad, esté empujando a abortar a muchas mujeres que en otros casos no se lo plantearían. De hecho, el 28,09% de las mujeres que abortan está en paro o no trabaja. El 45,8% trabaja (3,51 puntos menos que en 2011) pero puede abortar presionada por el miedo al despido. Un cambio importante que se está produciendo es la mayor presencia de españolas entre las mujeres que abortan, quizá atribuible al retorno de las inmigrantes a sus países de origen. En 2009, las mujeres españolas fueron el 57,21% del total de las que abortaron, mientras que en 2013 fueron el 71,59%.

La segunda hipótesis es que en la sociedad se está consolidando una mentalidad abortista, tras 29 años de aborto legal. Las mujeres que terminan con su embarazo, incluso las de mayor edad, hace diez o veinte años estaba entre los grupos de edad que más abortaban. Un dato que sustenta esta tendencia es el número cada vez mayor de mujeres que abortan repetidas veces.

En 2013, un 24,94% de mujeres ya había abortado una vez, y un 12,31% (13.380 mujeres) dos o más veces. Este último dato supone un crecimiento del 55,23% respecto a las mujeres que abortaron dos o más veces en 2004, que sólo fueron un 7,93%.