Este jueves, el Congreso de los Diputados daba luz verde a la iniciativa presentada por el Partido Socialista para castigar con prisión, multas y trabajos comunitarios "a quien acose a una mujer que acuda a una clínica" a abortar.
Pese a la aprobación de la norma, la asociación Abogados Cristianos considera que todo el que lo desee puede ir a "rezar a las puertas de los centros de aborto e informar pacíficamente a las mujeres y sus acompañantes". Para ello, ha publicado una lista de recomendaciones que puedes consultar aquí.
Sin embargo, la diputada socialista Laura Berja se ha preocupado de remarcar la negativa ante esta posibilidad durante la aprobación de la iniciativa y ha recordado que, a su juicio, "el rezo no es libertad de expresión si el fin que se persigue es señalar y coaccionar".
Se pueda rezar o no, los organizadores de 40 Días por la Vida son conscientes de que, más allá de que la iniciativa vulnere la libertad de expresión, el fin del aborto "humanamente, es un objetivo difícil de conseguir" y responde a una "lucha espiritual".
En este sentido, la coordinadora en España de la organización internacional, Nayeli Rodríguez, ha declarado a Mater Mundi el mismo día de la aprobación del texto que la del aborto "es una lucha sobrehumana" que precisa de "armas espirituales".
"Podemos hacer muchas cosas pero en última instancia, como hombres, no es posible acabar con el aborto", mencionó Rodríguez.
El "impresionante crecimiento" de 40 Días por la Vida
40 Días por la Vida, organización nacida en Texas en 2009 con sede en la que anteriormente fue una sucursal de Planned Parenthood, organiza dos campañas anuales de oración ante los centros abortistas en los países donde se encuentra implantada.
En España aterrizó en 2016 y solo tardó 3 años en lograr una movilización que su coordinadora considera "impresionante": en su última convocatoria participaron más de 2500 voluntarios en 8 campañas por todo el país.
Tal como menciona Rodríguez, los integrantes de la organización provida "no tienen miedo" a las represalias anunciadas por los socialistas y ya han anunciado los detalles de su próxima campaña, que tendrá lugar entre el 2 de marzo y el 10 de abril.
"No vamos a exigir a ninguno de los voluntarios que asuma el riesgo, pero por supuesto que los organizadores lo vamos a asumir", afirmó Rodríguez este sábado a Religión en Libertad.
La coordinadora explica que además, van a ofrecer su apoyo a todos los voluntarios que continúen y explica que cuenta con un eficaz aparato legal sostenido por la organización internacional que ya ha obtenido victorias en casos similares, como Frankfurt, gracias a la labor del abogado Tomislav Cunovic.
Puedes leer aquí la entrevista completa que realizamos en Religión en Libertad al abogado de 40 Días por la Vida Tomislav Cunovic.
Para ello, Nayeli avanza que su organización está desarrollando un protocolo de actuación y pide a todos los que se inscriban a los turnos de oración "que sigan las instrucciones que se impartirán en los próximos días".
"El fin de esta ley no es meter a la gente en la cárcel, sino meter miedo y dividir a la gente y a los provida. Por eso sabemos que ahora, más que nunca, tenemos que seguir adelante. Nuestros voluntarios siempre han estado en buenas manos y seguiremos velando por su cuidado", asegura a este medio.
Como se puede consultar en su página web, la organización está teniendo un crecimiento significativo: en esta nueva campaña estarán presentes en 19 ciudades. A un mes de que comiencen las vigilias de oración, ya hay más de 1.500 personas inscritas.
Las nuevas localidades que contarán con la iniciativa de 40 Días por la Vida este 2022 son Murcia, Zaragoza, Sevilla, Bilbao, Castellón, Oviedo, Toledo y Badajoz.
Consulta aquí tu campaña más cercana de 40 Días por la Vida 2022.
Para el gobierno, estas 4 jóvenes representan el perfil de violentas acosadoras de mujeres que quieren abortar.
"Afrontamos la ley con paz pero con astucia"
Rodríguez afirma que desde la organización afrontan la nueva legislación "con mucha paz pero con astucia: Si Dios quiere, si tenemos que estar en la cárcel un tiempo será lo que tenga que ser", afirma. "Nosotros no vamos a ser mártires, solo iremos a la cárcel, pero hay testimonios de mártires que honran la fe que tenemos y creo que acomodarnos en nuestro sofá es desprestigiar esos grandes testimonios", añade.
Rodríguez se muestra firmemente convencida de la labor que realizan en su organización: "Si se trata de defender la verdad hay que hacerlo. Llevamos demasiado tiempo callados y por eso avanzan estas leyes que destruyen a la mujer, a la familia y a la sociedad".
Para la coordinadora, que esta ley se haya discutido en el congreso un día antes de la campaña -como ocurrió en 2021- "dice mucho de los políticos que se consideran ateos: tienen miedo, y hacen bien, porque Dios es mucho más fuerte que la cultura de la muerte. Están asustados por gente que reza, y teniendo en cuenta que ellos no creen en nada, es evidente y claro que la oración está funcionando".
"Está despertando la esperanza"
Rodríguez remarca que en su organización parte de la base de que "la evangelización tiene que ser publica y llegar a las calles" y contempla esta ley como "un testimonio que está despertando la esperanza de los ciudadanos".
Especialmente entre los jóvenes, que ocupan la mayor parte de los colaboradores y asistentes. Los organizadores se sienten "especialmente afortunados" por este dato, y lo achacan a la responsabilidad de la lucha contra el aborto y la facilidad para participar en las campañas.
"El aborto es un drama que se invisibiliza, pero cuando lo sacas a la luz y le dices a un joven, con ganas de cambiar el mundo, que su participación es sencilla y puede marcar la diferencia, eso le motiva", explica.
Cuenta que en cada campaña ve como muchos de los jóvenes acuden movidos por sus grupos de amigos, especialmente en Madrid y Valencia, donde incluso han surgido noviazgos y matrimonios.
"Se han dado cuenta de que cuando rezas ante un abortorio y conoces el drama y sufrimiento que hay ahí, te dan ganas de seguir luchando por esa causa", comenta.
"Tenemos el apoyo de Dios, el más grande, de Cristo, que también fue perseguido. Es parte de la vida del cristiano, lo que no podemos hacer es quedarnos callados y no hacer nada. Vamos a seguir adelante", concluye Rodríguez.