Fueron miles los costarricenses que participaron en la manifestación en la capital, San José, convocada por los obispos católicos del país. Estos concedieron a los asistentes a la Caminata la indulgencia plenaria, es decir, la eliminación temporal de la pena que queda después de haber cometido pecado y haberse confesado.
La Caminata, en la que participaron personas venidas de todo el país, se inició a las 9 de la mañana en las inmediaciones del Parque Central y finalizó con una Eucaristía en el Parque Metropolitano de La Sabana. Durante la mañana se realizaron diferentes actividades culturales, oraciones y cantos religiosos en todo el sector de Avenida Segunda.
La legislación vigente en Costa Rica permite el aborto cuando está en riesgo la salud o la vida de la madre. Mientras los católicos reclaman que se salvaguarde la vida del concebido también en estos casos, otros grupos presionan para incluir el supuesto de violación entre los "motivos" para el aborto.