Más de 20 mil matrimonios sobre todo de Hispanoamérica renovaron sus promesas matrimoniales desde sus hogares gracias a la organización Familia Unida Internacional, el pasado 30 de mayo, informa la revista Vida Nueva. Esta idea nació a raíz de las tensiones que surgen en las familias por culpa del confinamiento, por lo que sus organizadores vieron que era más que oportuno ofrecer motivos de esperanza en medio de la pandemia. De esta forma, la renovación estuvo precedida de unas reflexiones por parte de diferentes sacerdotes especializados en temas matrimoniales, como el perdón o la comunicación. Las videoconferencias llevan por título: “Volver a lo esencial”, impartida por Adolfo Güémez; “El lenguaje del perdón”, por Guillermo Serra; “Amar es la manera más intensa de vivir”, por Ángel Espinoza; y “De la escasez a la abundancia”, a cargo de Evaristo Sada.
Tensión familiar intensificada por el confinamiento
En este contexto, Vida Nueva ha hablado con el sacerdote español Guillermo Serra, asesor de Familia Unida Internacional, en torno a las problemáticas principales a las que se enfrentan los matrimonios no sólo durante la cuarentena, sino en la actualidad.
Para el sacerdote –famoso en las redes sociales por sus reflexiones en torno a este sacramento–, es un hecho que las tensiones normales de la vida familiar se han ido intensificando en este periodo de confinamiento, por lo que la idea de esta iniciativa fue ofrecer a las parejas algunas ideas para ayudarles a manejar situaciones que son propias de su relación, pero que se han ido agudizando en este tiempo.
Expresó que una de las cosas que los matrimonios deben recordar, sobre todo en los momentos difíciles, es que “el amor es la mejor forma de vivir; vivir primero el amor de Dios, y es así como Dios va bendiciendo el matrimonio”.
Las problemáticas más comunes
El padre Guillermo Serra afirma que la problemática más común que enfrentan los matrimonios es la falta de comunicación, seguida de una gran necesidad de renovar el amor: “Y es que el tiempo nos hace mayores, pero no mejores; por eso debemos conocer los medios para renovar el amor en pareja, y que éste se refleje en acciones diarias; si no lo hacemos, el tiempo corre en nuestra contra”.
Una tercera problemática –apunta– tiene que ver con el perdón, que no es otra cosa que “un modo excepcional de amar”. Continúa: “Al perdón se llega cultivando la humildad, que es lo más difícil, esto significa ser consciente de mis debilidades como persona y de que mis acciones y palabras pueden herir a mi esposo o a mi esposa”.
Cuando los matrimonios logran entender lo anterior –dice–, crece; si no hay humildad, entonces se estancan los esposos, se encierran en su propio punto de vista. “Es importante recordar que el amor requiere, de cada miembro de la pareja, humildad para dar todo de su parte, y humildad para recibir de la otra parte lo que él o ella quieran dar, no lo que yo quiero que me dé”.
Para el padre Serra, los esposos deben entender que el amor es así, y “no esperar a que la otra persona dé lo mismo que yo, sino lo que ella me quiera dar”.
Familia Unida Internacional imparte programas de formación y “busca servir a la familia con innovación y excelencia a través de principios sólidos, espíritu de servicio, y manteniendo siempre un sentido trascendente y humanista de la familia a través de todas sus etapas y circunstancias”.