Hungría se ha convertido en un verso suelto en la Unión Europea. Lo es por muchos asuntos en los que ha optado por una línea diferente a sus socios lo que le ha generado la antipatía de varios gobiernos. Su apuesta decidida por la familia, su defensa de la herencia cristiana de Europa y el hecho de priorizar las políticas natalistas a la inmigración masiva han sido algunas de las apuestas decididas tomadas por el Gobierno de Viktor Orban.
Un año después de poner en marcha el Plan de Acción para la Protección de la Familia, Hungría ofrece los primeros resultados y los datos parecen dar la razón al gobierno húngaro. Una apuesta decidida por la familia y la natalidad funciona, aunque aún es pronto para ver si esta tendencia es definitiva o simplemente se debe a la novedad de la batería de ayudas ofrecidas por el Ejecutivo de Orban.
Resultados visibles un año después
La ministra de Familia, Katalin Novák, ha informado de los datos de este plan profamilia y provida un año después del inicio de su aplicación. A través de Twitter informaba que a día de hoy “el número de divorcios está en mínimos de hace 60 años, los matrimonios en máximos de hace 40 años; la tasa de fertilidad está aumentando en comparación con el año pasado; el número de abortos ha caído en un tercio”.
En este sentido, la Oficina Central de Estadística de Hungría ha informado que los nacimientos registrados en este pasado mes de mayo aumentaron casi un 2% en comparación con el mismo período del 2019, ralentizado la pérdida de población natural en un 18%. Además, el número total de nacimientos en los primeros cinco meses de este año han sido 36.527, es decir, un 4,8% más alto que en el período enero-mayo de 2019-
Novák también ha informado que en este año han sido alrededor de 200.000 familias las que se han beneficiado de alguna de las medidas de este plan. La más popular ha sido el préstamo sin intereses de hasta 29.000 euros a parejas casadas y que en caso de tener 3 o más hijos les será condonado. Si tienen dos hijos tendrían que devolver sólo dos tercios del préstamo.
Ayudas para las familias con hijos
“Hemos construido nuevas guarderías, introducido la exención de por vida del impuesto de la rente para mujeres con 4 hijos; hemos dado más ayudas a las familias para comprar viviendas y reducir sus hipotecas”, explicaba igualmente la ministra a través de las redes sociales.
En este caso Hungría ofrece en caso del nacimiento del segundo hijo 3.150 euros a la familia para el pago de la hipoteca, 12.580 tras el nacimiento del tercero y 3.150 euros por cada hijo a partir del cuarto.
Por otro lado, el gobierno húngaro sabe que si se fomenta la natalidad las familias tendrán otro tipo de necesidades y por ello concede una ayuda de 7.862 euros para poder adquirir vehículos más grandes, a partir de 7 plazas, para las familias numerosas a partir de tres hijos.
Hungría tiene al igual que el resto de Occidente un grave problema de natalidad y de envejecimiento de la población. Pero a diferencia de otros países, Orban no ha querido optar por la vía más corta y sencilla para paliar esta situación como es la inmigración y desde hace años decidió apostar por la natalidad, un plan más a largo plazo y complicado.
Un 4% del PIB para políticas familiares
Durante años, en Hungría han ido intentando crear un clima más favorable a la familia y finalmente el pasado año lanzaron su gran plan. En 2010 la tasa de fertilidad se situaba en este país en el 1,21, en 2017 había aumentado hasta el 1,42 y el objetivo del Gobierno es llegar a los 2,1 hijos, tasa de reemplazo generacional, para el año 2030.
Sin embargo, el Gobierno de Hungría no quiere quedarse ahí y pretende seguir apoyando a las familias para que los que decidan tener hijos no tengan una “desventaja financiera” frente a los que no tienen”. Y para ello, invierten ya el 4% del PIB en iniciativas de apoyo a la familia, superando el 2,55% de media de los países OCDE.
Por ello, a partir de este mismo mes, Novák anunció que las madres pasarán a cobrar el 100% de su salario bruto durante los primeros seis meses de baja maternal. Hasta ahora, cobraban el 70%.
Una cultura más favorable a las familias
En una entrevista realizada el pasado mes de diciembre, la ministra Novak afirmaba que “nuestro futuro está en las familias fuertes”.
Pero además ofrecía una reflexión muy interesante. En este plan todo giraba en torno a ayudas económicas, pero en su opinión este no debe ser el fin. Considera importante los incentivos financieros pero aún más el que haya una cultura que aliente y normalice que haya niños. “Hablamos demasiado de dinero pero en realidad tener hijos no es una cuestión de dinero”, agregó
Por ello, Hungría tiene como objetivo crear una cultura que sea más acogedora para las familias, primero a través de unos valores y luego con una serie de leyes y normativas provida y profamilia. “Sin una identidad fuerte, no se puede asumir la responsabilidad de los demás”, recalca.
Ahora el Estado emite mensajes públicos sobre que “la vida es un regalo” y que el tener hijos “es una aventura para toda la vida”. “¿Realmente se reconoce a las madres que cuidan a sus niños? ¿Realmente se valora a esa madre que se queda en casa cuidando a cinco, seis, siete niños y no desempeña un papel activo en el mercado laboral? ¿Realmente las valoramos? ¿Las reconocemos?”, preguntó la ministra.