Mario Grech, actualmente obispo de Gozo en Malta, ha sido nombrado este miércoles por el Papa Francisco como pro-secretario general del Sínodo de los Obispos, cargo en el que acompañará un tiempo al cardenal Leonardo Baldisseri hasta que finalmente éste acabe su mandato. Posteriormente, será Grech el que esté al frente de esta responsabilidad en solitario.
De hecho, antes de que apareciese publicado en el Boletín de la Santa Sede ha sido el mismo cardenal el que ha realizado el anuncio, precisamente pocos días antes del inicio del Sínodo para la Región Panamazónica. “En nombre del Santo Padre - declaró Baldisseri - tengo el honor de comunicar lo siguiente: el Santo Padre, hoy, nombra Pro-Secretario General del Sínodo de los Obispos a Monseñor Mario Grech, Obispo de Gozo".
Primero conocerá la institución junto al cardenal
El cardenal explicó que el Papa nombró a Grech como administrador apostólico “de la misma diócesis hasta que haya un nuevo obispo”. “El Pro-Secretario General, al tomar posesión de su cargo -añadió Baldisseri- caminará junto al Secretario General para obtener un conocimiento directo de la institución y de sus componentes, y adquirir conciencia de los procesos e instancias de competencia”.
Según explica Vatican News, Grech “ejercerá su cargo de Pro-Secretario General hasta el final del mandato del Secretario General, con el fin de asumir su cargo”. El cardenal ha precisado que el nombramiento ya prevé una sucesión a la guía de la Secretaría sinodal en cuanto se acepte la renuncia presentada por Baldisseri, que cumplirá 80 años en septiembre de 2020. El cardenal concluyó su intervención anunciando que, como Pro-Secretario General, Mons. Grech «participará como miembro en la próxima Asamblea sinodal que comenzará el 6 de octubre».
Nacido el 20 de febrero de 1957 en Qala, Grech fue ordenado sacerdote en 1984 y nombrado obispo de Gozo en noviembre de 2005 por Benedicto XVI.
Gozo es una pequeña isla en medio del mar Mediterráneo que forma parte de la República de Malta. Tiene una superficie de 67 kilómetros cuadrados, una cuarta parte de la de todo el archipiélago y una población de alrededor de 32.000 personas. La diócesis es una de las más pequeñas de la Iglesia Católica, pero también una de las que tiene una de las tasas más altas de sacerdotes en comparación con su población.