Como cada año en estas fechas se está celebrando el Encuentro Europeo de Jóvenes de la Comunidad de Taizé, que este año se celebra en la ciudad polaca de Breslavia. En un mensaje enviado a los miles de participantes, el Papa les ha pedido estar “siempre preparados para nuevas salidas, para dar testimonio del Evangelio y para estar plenamente presentes para aquellos que los rodean, especialmente para los más pobres y más desafortunados”.
En el mensaje, enviado por el Secretario de Estado Vaticano, el cardenal Pietro Parolin, el purpurado asegura que el Pontífice acompaña a los jóvenes con su oración y los anima a profundizar, junto a los cristianos de Polonia, el tema que han elegido para este encuentro en Breslavia: “Siempre en camino, nunca desarraigados”.
Firmes en las pruebas
Asimismo, el Santo Padre les recuerda que, “Polonia es un país que tiene sus raíces en la fe; estas raíces han permitido a este pueblo mantenerse firme ante las grandes pruebas, cuando la esperanza se hacía pedazos. Descubrirán – afirma el Papa – que hay mucho que aprender de aquellos que permanecieron fieles a Cristo, cuando la tentación hubiera sido aquella de ceder a la salida más fácil. Estos cristianos se atrevieron a creer en otro futuro”.
Tal y como recoge Vatican News, Francisco invita a los jóvenes a que, juntos puedan descubrir hasta qué punto el arraigo en la fe los llama y los prepara para ir hacia los demás, para responder a los nuevos desafíos de nuestras sociedades, especialmente a los peligros que pesan sobre nuestra Casa común. Y citando la Exhortación Apostólica Post Sinodal Christus Vivit, el Pontífice recuerda a los jóvenes que, “las raíces no son anclas que nos atan a otras épocas y nos impiden encarnarnos en el mundo actual [...] Son, por el contrario – escribe el Papa – un punto de arraigo que nos permite desarrollarnos y responder a los nuevos desafíos”.
Por eso, continúa el Santo Padre, buscando, junto a muchos otros, descubrirán que hay mucha alegría en el partir, a veces – como Abraham – sin conocer con anticipación el destino. Estén siempre preparados para nuevas salidas, exhorta el Pontífice, para dar testimonio del Evangelio y para estar plenamente presentes para aquellos que los rodean, especialmente para los más pobres y más desafortunados. “No esperen a mañana para colaborar en la transformación del mundo con su energía, su audacia y su creatividad [...] Ustedes son el ahora de Dios, que los quiere fecundos”.
Antes de concluir su Mensaje, el Papa Francisco envía su bendición a todos los jóvenes, los hermanos de la Comunidad de Taizé, las familias y las parroquias que acogen a los participantes en este 42° Encuentro Europeo de los jóvenes. “Que la fe de María, que también ella salió ‘apresuradamente’ – concluye el Pontífice – pueda sostener el impulso de su confianza en su Hijo”.
Para este Encuentro Europeo organizado por la Comunidad de Taizé también enviaron sus Mensajes el Patriarca Ecuménico de Constantinopla Bartolomé I; el Patriarca de Moscú y de todas las Rusias Kirill; el Arzobispo anglicano de York y prior de Inglaterra, John Sentamu; el Secretario General del Consejo Mundial de Iglesias, Rev. Olav Fykse-Tveit; el Secretario General de las Naciones Unidas António Guterres y, por primera vez, la nueva Presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.